El mundo automovilístico está presenciando una revolución, especialmente en Europa, y Asturias podría estar en el centro de esta transformación. BYD (Build Your Dreams), un gigante automovilístico chino, está considerando a España, y en particular a Asturias, como una ubicación clave para sus futuras fábricas de coches eléctricos en Europa. Esta decisión se alinea con la creciente presencia de fabricantes de automóviles chinos en el mercado europeo, que ha visto un aumento significativo en las ventas e importaciones de vehículos chinos.
La expansión de BYD en Europa y España
BYD ha anunciado su intención de construir "más de una" planta en Europa, con España siendo un candidato importante. Las regiones de Francia, Alemania y España están siendo consideradas para la ubicación de su primera planta europea de coches eléctricos, con la decisión final prevista para más adelante este año. BYD ya tiene experiencia en Francia, donde operó una planta de autobuses eléctricos, aunque cesó la producción en noviembre de 2021 po la baja demanda. La compañía, sin embargo, sigue comprometida con el mercado francés. Representantes de BYD han visitado la Zalia y el puerto de Gijón en Asturias, mostrando un interés significativo en la región. Asturias, con su compromiso con la innovación y el desarrollo sostenible, presenta una oportunidad atractiva para BYD, particularmente en el contexto de las ayudas a la inversión que ofrece cada territorio.
El auge de los coches chinos en España
La presencia de coches chinos en España ha experimentado un crecimiento exponencial. En 2022, las exportaciones de vehículos chinos a España fueron 20 veces superiores a las del año anterior, alcanzando un valor de 1.39 mil millones de euros. Este aumento colocó a China como el cuarto mayor exportador de coches a España, superando al Reino Unido. Marcas como MG, Lynk & Co, Aiways y Maxus han visto un aumento significativo en sus ventas en España.
Este crecimiento refleja cómo los fabricantes chinos están aprovechando las brechas en el mercado europeo y creando una base de clientes que se sienten algo descuidados por otras marcas internacionales. La tecnología china, que está un paso adelante en comparación con el resto del mundo, junto con productos de buena calidad y precios competitivos, son factores clave en este crecimiento.
Competencia e innovación en el mercado europeo
Los fabricantes chinos de automóviles están entrando en el mercado europeo con ambiciones claras de aumentar su competitividad internacional. Aunque muchos consumidores europeos todavía no están familiarizados con los coches "made in China", esta percepción está cambiando. Más de 10 fabricantes chinos han lanzado o están a punto de lanzar vehículos eléctricos (EV) en Europa, con marcas como Polestar y MG ya estableciéndose entre los 20 EV más vendidos en Europa.
Los fabricantes chinos están presentando automóviles de alta tecnología y calidad a los clientes europeos. Marcas como Great Wall Motors (GWM) planean lanzar modelos totalmente eléctricos, como el Funky Cat y el híbrido enchufable Coffee 01, en Europa. Estos modelos han obtenido calificaciones de cinco estrellas en las pruebas de Euro NCAP, demostrando la capacidad de la empresa para competir en términos de seguridad y calidad.