Un descubrimiento arqueológico sin precedentes ha salido a la luz en el yacimiento tartésico de Casas del Turuñuelo, ubicado en Guareña (Badajoz). Investigadores del Instituto de Arqueología (IAM-CSIC) han revelado detalles de un ritual masivo que tuvo lugar hace unos 2.500 años, considerado el mayor sacrificio de animales registrado en el Mediterráneo occidental durante la primera Edad del Hierro.

El estudio, publicado en la revista Plos One y liderado por el IAM-CSIC con sede en Mérida, ha desentrañado los misterios detrás del sacrificio de más de 50 animales, incluyendo seis bovinos, cuatro cerdos, un perro y 41 équidos. Los hallazgos sugieren que estos sacrificios formaron parte de una serie de rituales llevados a cabo en los últimos años del edificio, hasta su abandono a finales del siglo V a.C.

Los directores de las excavaciones, Sebastián Celestino y Esther Rodríguez, han explicado que los restos óseos y el análisis microestratigráfico revelan un patrón de entierro en tres fases distintas. En la primera fase, algunos animales fueron expuestos a la intemperie, sufriendo la acción de carroñeros. Posteriormente, en las fases dos y tres, los esqueletos se encontraron completos y en conexión anatómica, indicando un entierro rápido. Además, se descubrieron restos de un banquete que incluía carne de bovinos y porcinos.

Este trabajo interdisciplinar, que ha contado con la colaboración de investigadores tanto nacionales como internacionales, ha revelado también el hallazgo de vegetales incinerados y objetos asociados a actividades simbólicas, como tabas de oveja. La disposición de los cadáveres de animales sugiere una intención en la exposición y escenificación de los sacrificios.

Este descubrimiento arroja luz sobre las prácticas rituales de las últimas comunidades de Tarteso y subraya la importancia de los équidos en los sistemas económicos y culturales de la Edad del Hierro. Los investigadores destacan la relevancia de estos hallazgos para comprender mejor las sociedades europeas de la época y sus prácticas culturales.

El yacimiento de Casas del Turuñuelo, descubierto en 2017, se ha convertido en un tesoro arqueológico que continúa ofreciendo valiosos conocimientos sobre la cultura tartésica. El proyecto 'Construyendo Tarteso', parte del Plan Estatal I+D+i, ha jugado un papel crucial en la excavación y estudio de este importante sitio, revelando detalles como relieves figurados y técnicas constructivas únicas en el Mediterráneo occidental. Estos descubrimientos no solo enriquecen nuestra comprensión de la historia antigua, sino que también marcan un hito en la arqueología del Mediterráneo occidental.