Adrián Barbón, presidente del Principado de Asturias, ha marcado una postura clara y contundente respecto a la posible condonación de deuda a Cataluña: solo apoyará la medida si también beneficia a Asturias. "No extiendo cheques en blanco a nadie", declaró Barbón en el pleno de la Junta General.
Asturias, con un nivel de endeudamiento del 16,4% del PIB en 2022, se destaca como una de las comunidades autónomas menos endeudadas de España. Este dato, reflejo de una gestión financiera rigurosa, coloca a la región en una posición desfavorable frente a una quita de deuda que solo considere el capital pendiente y los intereses. Asturias, cuya deuda viva es de aproximadamente 4.300 millones de euros, ha sido una de las pocas regiones que logró reducir su deuda el año pasado.
Barbón, al abordar este tema, fue enfático en su rechazo a un cálculo de quita basado únicamente en la deuda viva. Propuso, en cambio, una estimación basada en la reducción de ingresos sufrida por las comunidades durante la Gran Recesión de 2008, que afectó a Asturias como al resto de España. "Si se estima el porcentaje de deuda respecto a la caída de ingresos, entonces sí estaremos de acuerdo, porque beneficiará a Asturias", explicó el presidente.
Durante su intervención, Barbón también abordó otros temas de interés regional, incluyendo la oposición a la cesión del 100% de los ingresos fiscales a Cataluña y la defensa de una reforma en el sistema de financiación autonómica que considere factores como el envejecimiento o las dificultades orográficas. Además, reafirmó su compromiso con el bienestar de Asturias y la búsqueda de acuerdos políticos amplios para fortalecer la posición de la región.
El presidente concluyó subrayando la importancia de la diplomacia discreta, la cual ha beneficiado a Asturias en diversos proyectos y compromisos, como el rescate de Duro Felguera y el mantenimiento de la fábrica de armas de Trubia. "Ese es el camino", afirmó, destacando los logros y la firme defensa de los intereses de Asturias.