El documento responde a la Ley de Calidad Ambiental, que establece un objetivo mínimo del 40% en la utilización de subproductos o materias primas secundarias
El Gobierno de Asturias ha publicado una Guía de usos de áridos reciclados a partir de residuos de construcción y demolición (RCD). El documento pretende convertirse en una referencia obligada para la utilización en las obras del Principado de subproductos y materias primas secundarias procedentes de derribos, reformas o desmontajes de edificios e infraestructuras.
La elaboración de esta guía da respuesta a lo establecido en el artículo 20 de la Ley del Principado de Asturias 1/2023, de 14 de marzo, de Calidad Ambiental, que fija un objetivo mínimo del 40% en el uso de áridos reciclados a partir de residuos de construcción y demolición.
El documento está disponible para su libre descarga en la web de medio ambiente del Principado, en el apartado de economía circular a través del enlace: https://medioambiente.asturias.es/general/-/categories/2920936
La Ley de Calidad Ambiental plantea la necesidad de que en los pliegos de cláusulas administrativas y prescripciones técnicas para la ejecución de contratos de obras y suministros de las administraciones públicas se indiquen los porcentajes que se tienen que utilizar de subproductos, materias primas secundarias, materiales reciclados o provenientes de procesos de preparación para la reutilización que se tienen que utilizar.
En la guía se identifican los materiales que pueden ser elaborados a partir de RCD: suelos reciclados, zahorras recicladas, árido reciclado para hormigón, arena reciclada para camas de tubería, etcétera. También se recogen las condiciones técnicas que estos deben cumplir para que puedan ser utilizados en los distintos tipos de obras promovidas por el Principado y los ayuntamientos.
“Con la publicación de esta guía pretendemos facilitar a los proyectistas, contratistas, gestores de residuos y fabricantes de áridos el uso de los residuos de construcción y demolición en la obra civil, en la edificación y el urbanismo, tanto en el ámbito de actuación público como privado”, señala la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí.
Uso de los residuos de construcción y demolición
Los RCD provocan uno de los flujos de residuos más pesados y voluminosos en la Unión Europea (UE) y representan entre el 25% y el 30% de los materiales de desecho generados a nivel europeo. Entre ellos figuran el hormigón, los ladrillos, el yeso, la madera, el vidrio, los metales, el plástico, los disolventes y la tierra excavada, muchos de los cuales pueden reciclarse por su alto valor como recursos.
En particular, existe un mercado de reutilización para los áridos derivados de residuos de RCD en carreteras, urbanizaciones, drenajes y otros proyectos de construcción. La tecnología para la separación y recuperación de desechos de construcción y demolición está muy desarrollada y es sostenible desde el punto de vista económico. Además, varias empresas regionales, cuya relación puede consultarse en el enlace facilitado anteriormente, trabajan ya en esta línea de negocio.