Ser una empresa de gran valor puede tener efectos significativos en el país de origen, ya sean problemas considerables o beneficios notables. Un ejemplo de esto es Nokia, que durante años fue el líder en la economía de Finlandia, contribuyendo hasta un 4% al PIB del país en su apogeo. Sin embargo, el declive de Nokia también resultó en una década de estancamiento económico en Finlandia, agravando sus problemas tras su colapso en 2008, en gran medida debido al surgimiento del iPhone.
En la actualidad, Dinamarca enfrenta una situación similar con su empresa más valiosa, Novo Nordisk, cuyo valor de mercado ha superado los 419.000 millones, excediendo el PIB del país que es alrededor de 406.000 millones. Esto está comenzando a afectar la economía danesa, conduciendo a tasas de interés excepcionalmente bajas debido al éxito de Novo Nordisk y su medicamento contra la obesidad llamado Ozempic.
El medicamento Ozempic ha impulsado el éxito de Novo Nordisk al satisfacer la creciente demanda global de tratamientos para la pérdida de peso. La compañía ha dominado el mercado estadounidense gracias a ser el único fabricante aprobado por la FDA de un fármaco altamente exitoso llamado semaglutida, que es el ingrediente activo en Ozempic y en Wegovy, un tratamiento para la obesidad.
Este éxito ha convertido a Novo Nordisk en la segunda empresa pública más valiosa de Europa, superando a empresas nacionales como Lego y Carlsberg. Se proyecta que las ventas de medicamentos de Novo Nordisk alcancen los 6.000 millones este año y casi 15.000 millones anuales en 2027, según los analistas de FactSet.
Sin embargo, este éxito está teniendo un impacto en la economía danesa. Debido a la fuerte expansión de las exportaciones farmacéuticas, hay una afluencia de divisas que está debilitando la moneda danesa y creando desequilibrios económicos. Además, el crecimiento de Novo Nordisk está enmascarando otras debilidades económicas en Dinamarca, que habría experimentado un estancamiento sin la contribución de la industria farmacéutica.
Este nivel de dependencia en una sola empresa también hace que la economía sea más vulnerable. Si Novo Nordisk enfrentara dificultades, podría arrastrar consigo a toda la economía danesa, generando una situación similar a la que Nokia tuvo en Finlandia. Esto significa que la economía está en cierto modo atada al éxito continuo de la empresa.
Por otro lado, el éxito de Novo Nordisk ha creado empleos y las tasas de interés más bajas también pueden beneficiar a los compradores de viviendas en Dinamarca.
En definitiva, el éxito de una empresa como Novo Nordisk puede tener tanto beneficios como desafíos significativos para la economía de su país de origen, siendo importante considerar tanto los aspectos positivos como los riesgos potenciales.