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El programa de actividades abordará, entre otros asuntos, las investigaciones sobre la cerámica hallada en el yacimiento y las peculiaridades de la navegación en el Cantábrico
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Las conferencias y salidas de campo serán gratuitas y se desarrollarán en agosto y septiembre en el Museo Arqueológico y el auditorio de As Quintas, en A Caridá
El Principado participará de nuevo en las Jornadas Europeas del Patrimonio, que cada año impulsan el Consejo de Europa y la Comisión Europea y en las que participan 50 estados, para dar a conocer y acercar a la ciudadanía patrimonio cultural que habitualmente no está abierto al público o no es muy conocido. El castro de cabo Blanco, en El Franco, será el protagonista de la programación que la Consejería de Cultura, Política Lingüística y Turismo y el Museo Arqueológico de Asturias han organizado con la colaboración del ayuntamiento del concejo.
El programa se desarrollará en los meses de agosto y septiembre con actividades que incluyen salidas de campo guiadas, conferencias y mesas redondas en las que se debatirán los últimos avances en el estudio científico de este singular yacimiento. Entre otras cuestiones, se abordarán los hallazgos y características de la cerámica localizada en el conjunto castreño de cabo Blanco y también las peculiaridades de la navegación en la costa Cantábrica durante la antigüedad. Todas las actividades serán gratuitas y se desarrollarán en el Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo/Uviéu; el Ayuntamiento de El Franco y el complejo cultural de As Quintas, en A Caridá.
Las conferencias y mesas redondas se complementarán con salidas de campo para recorrer el conjunto arqueológico de cabo Blanco y visitar las excavaciones en el monte del castro de Mouguías/Mohías, en Coaña.
Las Jornadas Europeas del Patrimonio son una iniciativa conjunta de los firmantes de la Convención Cultural Europea que persiguen difundir el patrimonio cultural. La primera edición se puso en marcha en 1985 y, desde entonces, se han consolidado como uno de los acontecimientos culturales participativos de mayor amplitud en Europa.
Durante las fechas de celebración, miles de monumentos y sitios abren sus puertas, algunas de ellas normalmente cerradas al público el resto del año, lo que permite a la ciudadanía visitarlos de forma gratuita.