El Ejecutivo asturiano ha dado luz verde a la creación e implantación de la categoría de enfermera especialista en el Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa), que incluye las distintas especialidades reguladas por la normativa estatal vigente en cada momento, como enfermería familiar y comunitaria, geriátrica, pediátrica, obstétrico-ginecológica, del trabajo, de salud mental o médico-quirúrgica. La norma facilitará la incorporación y el pleno reconocimiento de profesionales especialistas que por sus competencias pueden contribuir a la mejora de la calidad de la red sanitaria pública.
Para acceder a la nueva categoría profesional como personal estatutario fijo, temporal o sustituto, será indispensable estar en posesión del título de diplomado o grado universitario en enfermería, o su equivalente si se trata de títulos extranjeros expedidos por el ministerio competente. También es necesario estar en posesión del título de especialista en la especialidad correspondiente, de la certificación sustitutiva, de la credencial de homologación o del certificado de equivalencia a titulación y a nivel académico universitario oficial.
El texto establece que la dotación de las distintas plazas se hará efectiva de forma progresiva mediante la creación de nuevas o la reconversión de otras ya existentes a través de la correspondiente modificación de la plantilla orgánica del Servicio de Salud.
El decreto, que entrará en vigor a los veinte días de su publicación en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (Bopa), permitirá al Sespa contar con una categoría profesional adaptada a las necesidades actuales al sistema sanitario, así como a la evolución de los conocimientos científicos en la formación de especialistas en Ciencias de la Salud y su adaptación a las directrices derivadas de la normativa comunitaria sobre la materia (Espacio Europeo de Educación Superior).