- La regulación admite las alegaciones de la Consejería de Industria para ampliar las actividades beneficiadas, como habían planteado las compañías del valle de Tamón
El Gobierno de Asturias considera que la nueva normativa sobre redes cerradas de distribución de energía eléctrica beneficiará al conjunto de las empresas asturianas y, en especial, a las ubicadas en polígonos industriales o complejos empresariales.
Las redes de distribución cerradas son aquellas que suministran energía eléctrica a una zona industrial. Permiten agregar tensiones de red como si fueran un único gran consumidor.
El real decreto, aprobado por el Consejo de Ministros el 25 de abril, abre la posibilidad de incluir actividades industriales diversas y centros de generación dentro de este tipo de redes.
La inclusión de ambos elementos da respuesta satisfactoria a las alegaciones planteadas por la Consejería de Industria, tras haber recibido peticiones de varias empresas. Esas solicitudes fueron recabadas por las direcciones generales de Industria y de Energía y trasladadas a los ministerios de Industria y de Transición Ecológica.
Las propuestas procedían especialmente de empresas ubicadas en el Valle de Tamón de cara a facilitar la continuidad y la seguridad del suministro eléctrico y mejorar con ello tanto la competitividad como la posibilidad de desarrollar proyectos de autoconsumo.
La nueva normativa permite que se puedan acoger más actividades, por lo que se amplía el abanico de industrias que pueden definir este tipo de redes y aumentar así su competitividad al disponer de mejores infraestructuras de abastecimiento de energía eléctrica.
Según Juan Carlos Aguilera, director general de Industria, la medida aprobada por el Consejo de Ministros “posibilitará la reducción de precios de suministro para algunas empresas y mejorará también la capacidad de generación con renovables, haciendo posible más autoconsumo”.
