El Consejero de Industria, Enrique Fernández, ha informado hoy al Ministerio de Defensa de las buenas condiciones de la fábrica de armas de Trubia para asumir el programa de construcción del futuro vehículo de acompañamiento al combate (VAC). La industria relacionada con el armamento ha aumentado su relevancia en el Principado en los últimos años, hasta el punto de facturar cerca de 140 millones y generar más de 500 empleos directos.
Fernández se ha reunido con la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce. En el encuentro se ha abordado la situación de la industria de la defensa en Asturias y las actividades que está desarrollando Santa Bárbara Sistemas, propietaria de la planta de Trubia, para el programa del vehículo de combate sobre ruedas (VCR) 8x8.
Este es, actualmente, el encargo más importante en el que trabaja la factoría. Concretamente, en Trubia fabrican componentes base para los vehículos como las barcazas, puertas, rejillas y trampillas y otros elementos estructurales. También se realizan ensamblajes de subsistemas del 8x8. Si a este programa se le sumase la construcción de los vehículos de acompañamiento al combate, la planta asturiana consolidaría su carga de trabajo para varios años.
En la reunión ha quedado de manifiesto que la reestructuración de las actividades de Santa Bárbara Sistema relativa a sus plantas de Trubia y Sevilla no afectará a la ejecución de los programas en vigor, entre los que figuran el VCR 8x8; VCAZP Castor y el Piraña IIIC, que cumplirán sus hitos y compromisos contractuales.
Tanto Valcarce como Fernández han analizado la importancia de esta rama de actividad. De acuerdo con la información facilitada por la secretaria de Estado, de las 477 empresas inscritas en el Registro de Empresas de Defensa, 24 están implantadas en Asturias. Además de Santa Bárbara Sistemas, destacan Expal Systems, Inetum España, astilleros Gondán, Idonial, ArcelorMittal, Danima Ingeniería Ambiental u Oxiplant.
Este registro incluye compañías con actividades en once subsectores: aeronáutico; naval; terrestre; espacial; armamento; misiles; electrónico; auxiliar; simulación; RPAS (Sistemas Aéreos Remotamente Tripulados) y materias primas.
Por destino de las ventas, las empresas asturianas acreditadas como proveedoras por el ministerio facturaron en 2021 un total de 139,9 millones. La actividad se centra en el subsector de vehículos terrestres de la mano de Santa Bárbara Sistemas y en menor medida la industria naval y de armamento.
Enrique Fernández ha indicado que “estas cifras ponen de manifiesto que la industria de la defensa es un pilar básico para la economía asturiana porque contribuye al incremento de la actividad económica, a la generación de empleo de calidad y al desarrollo de tecnologías y capacidades industriales que mejoran la posición competitiva del Principado en los mercados globales, además de ser un sector exportador”.