La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha publicado el Boletín Informativo de la distribución de carburantes en estaciones de servicio correspondiente al pasado mes de diciembre, que incluye un resumen del conjunto del año 2022. Una de las principales conclusiones es que el precio del carburante ha alcanzado su máximo histórico, y una de las causas es la guerra de Rusia en Ucrania.
El conflicto dio lugar a cotizaciones internacionales de los carburantes anormalmente elevados y una volatilidad excepcional como consecuencia de las sanciones a las refinerías rusas, en particular las del gasóleo, pues Rusia es uno de los principales proveedores de gasóleo a Europa.
La situación de los mercados internacionales ha impactado de lleno en los precios de los carburantes en Europa y España.
El precio medio en Península y Baleares se situó en 2022 en 1,790 €/lt para la gasolina 95 y en 1,807 €/lt para el gasóleo A, un aumento de 40 c€/lt y 55,2 c€/lt, respectivamente. En junio los precios alcanzaron el máximo, superando los 2 €/lt.
Gráfico: Evolución de los precios del gasóleo A y la gasolina. Fuente: CNMC
Las bonificaciones a los carburantes se trasladaron a los consumidores
El precio medio en Península y Baleares se situó en 2022 en 1,790 €/lt para la gasolina 95 y en 1,807 €/lt para el gasóleo A, un aumento de 40 c€/lt y 55,2 c€/lt, respectivamente. En junio los precios alcanzaron el máximo, superando los 2 €/lt.
El Gobierno aprobó una bonificación de 20 c€/lt sobre el precio final de los carburantes durante abril a diciembre. La CNMC supervisó la traslación de la ayuda al consumidor final a través del seguimiento de los márgenes brutos de las gasolineras.
Los márgenes brutos son la diferencia entre el precio antes de impuestos y la cotización internacional. Los márgenes fueron inusualmente volátiles debido a la evolución de las cotizaciones, y, en general, pudo constatarse que las estaciones de servicio trasladaron las bonificaciones al consumidor final.
En 2022 no es posible hacer comparaciones con Europa porque cada país adoptó medidas diferentes para hacer frente a la escalada de precios de los carburantes y empleó distintos criterios para el reporte a Eurostat, haciendo la comparación inconsistente.
¿Cuáles fueron las gasolineras más caras?
Hay que tener en cuenta que los precios analizados son los publicados en los monolitos sin bonificación ni descuento.
A partir de esta información, los precios más altos fueron los de BP, Cepsa y Repsol. Los más bajos continuaron observándose en las instalaciones independientes que son las que no están vinculadas a las petroleras.
Gipuzkoa fue la provincia peninsular que presentó en 2022 el precio de venta al público (PVP) más alto, en la mayor parte de los meses en gasolina 95 y durante todos los meses del año en gasóleo A. Por su parte, Almería, Tarragona y Lleida destacaron como provincias peninsulares con los precios más reducidos. Canarias, Ceuta y Melilla volvieron a marcar los PVP más bajos de todo el territorio nacional por su menor carga fiscal, así como (junto con Baleares) los precios antes de impuestos más elevados por su insularidad.
La demanda de carburantes sigue recuperándose
En 2022 la demanda de carburantes de automoción aumentó un 3,6%, pero es aún un 1,8% inferior a la de 2019.