La Confederación Hidrográfica del Cantábrico ha iniciado los trabajos enmarcados en el proyecto piloto de restauración morfológica en el tramo bajo del río Nalón.

Se ha analizado la evolución del río Nalón aguas abajo de Trubia, donde se evidencia un aumento de procesos erosivos en las márgenes que se relacionan en gran medida con una disminución en la llegada de sedimento en las últimas décadas. Con el objetivo de mitigar esta erosión, se plantea la reubicación de sedimento al tramo bajo del río Nalón, procedente de una zona del río Caudal donde su extracción contribuye a mitigar el riesgo de inundación.

La actuación se desarrolla concretamente en tres escenarios, por un lado, en la zona de extracción localizada en una barra fluvial de gran envergadura en las inmediaciones de Argame en terrenos de Ribera de Arriba y por otro, en dos zonas de depósito en las inmediaciones de Villamarín en Candamo y de la presa de Valduno II en Las Regueras.

El depósito se realizará en emplazamientos actualmente en seco por donde no circula el agua, en los que se ha constatado una erosión y pérdida de sedimento en las últimas avenidas y se ha verificado la compatibilidad sedimentaria entre el área fuente y las zonas de destino. Con la reubicación se recupera parte de la morfología previa a la erosión y se agrega sedimento que pueda incorporarse al canal paulatinamente en futuras crecidas.

Estas reubicaciones de sedimento forman parte de un conjunto de actuaciones contempladas en el proyecto piloto, dirigidas a mitigar la erosión y mejorar la conectividad ecológica del corredor fluvial del río Nalón, con el que se pretende obtener resultados preliminares de los potenciales beneficios de este tipo de actuación para el río Nalón a corto y medio plazo.

Entre los trabajos previstos para el movimiento de sedimentos, son necesarias unas tareas previas, como la eliminación de especies exóticas invasoras que están presentes en la zona de extracción. Los trabajos han comenzado con la eliminación

manual de plantas invasoras con ayuda de una mini retro excavadora para la extracción de la parte radical de las plantas.

La actuación, con un presupuesto próximo a los 135.000 €, se ejecuta a través de la empresa pública TRAGSA dentro del PLAN PIMA ADAPTA AGUA para las “Obras de Implantación de las Medidas de Gestión de Las Reservas Naturales Fluviales y Otros Cauces de Interés Ambiental en la Cuenca Hidrográfica del Cantábrico”. Este proyecto promovido por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, se financia por la Dirección General del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico con un presupuesto total de 1.998.874,94 €.