Gijón.-La consejera de Educación, Lydia Espina, ha visitado el Colegio Público Rey Pelayo, de Gijón/Xixón, para conocer de primera mano los daños causados por el hundimiento de un aula de infantil ocurrido durante la pasada madrugada. La consejera ha estado acompañada por la alcaldesa de Gijón, Ana González; la concejala de Educación, Natalia González; la directora del colegio, María del Pilar Álvarez, y por técnicos de departamento de infraestructuras de la consejería, del Ayuntamiento y de la empresa que va a elaborar un informe tras el hundimiento.

Espina ha manifestado que “la prioridad absoluta del Gobierno de Asturias y del Ayuntamiento de Gijón es garantizar la seguridad de toda la comunidad educativa” del colegio, así como “asegurar la escolarización del alumnado”. Para ello, la Dirección General de Planificación e Infraestructuras Educativas analiza desde primera hora de la mañana posibles espacios alternativos para realojar temporalmente a ese alumnado.

La consejera ha asegurado que la consejería “está preparada para cualquier contingencia” y que en Gijón “hay espacios suficientes” para acoger a esos niños y niñas de forma provisional, por lo que ha lanzado un mensaje de tranquilidad a las familias de los menores.

Asimismo, ha añadido que mañana, viernes 13 de enero, se van a suspender las clases en este colegio, pero ha garantizado que la reubicación se va a resolver “con la mayor agilidad posible”. La empresa que elaborará el informe para detectar las causas del derrumbe estima que estará concluido en un plazo de tres semanas.

Por último, Espina ha mostrado públicamente su agradecimiento por la solidaridad que han mostrado varios centros educativos de Gijón, “que se han puesto en contacto con la consejería y con la directora del colegio para ofrecer sus espacios y ayudar en la medida de lo posible al centro”.