Siete de cada diez españoles sigue pensando que consumen muchoTenerlas puestas 12 horas diarias durante un mes no costaría ni un euro
Con la crisis energética que estamos atravesando en el que la luz tiene un día un precio y al día siguiente el doble, muchos españoles están mirando con lupa el consumo de cualquier aparato electrónico en sus casas y con la llegada de las fiestas navideñas, las luces del árbol de Navidad se encuentran en el punto de mira. Y es que en cuatro de cada diez hogares que se solía poner el árbol este año no lo van a hacer.
El problema real de las luces del árbol de Navidad es el tipo de luz que se utilice, las luces LED, que son las que se venden actualmente, no consumen prácticamente nada, mientras que las antiguas incandescentes, cuya fabricación está prohibida en la Unión Europea sí que lo hacían, se calcula que las nuevas consumen un 80 % menos que las anteriores. Y a pesar de que un 84 % de los españoles ha cambiado las luces de su árbol en los últimos años, siete de cada diez hogares siguen pensando que las nuevas consumen mucho.
Así que, lo primero en lo que debemos fijarnos si queremos poner estas fiestas el árbol de Navidad con sus adornos y sus luces, y dormir tranquilos dejándolas encendidas el tiempo que queramos, es si nuestras luces son LED, sino, merece la pena hacer una pequeña inversión y cambiarlas. Pero este año, con el precio de la luz por las nubes surge las dudas que muchos españoles tienen, ¿cuánto consumen las luces de un árbol de Navidad? Y ¿cuánto me costaría tenerlas puestas este año? Los expertos de TK Home Solutions nos hacen el calculo para que durmamos tranquilos:
Lo primero que hay que hacer es conocer el voltaje de nuestras luces y cuantos vatios (W) consumen, esto viene en la etiqueta del producto, lo normal es que una tira de 200 luces consuma 6W cada hora, pongamos que tenemos dos tiras, es decir, 400 luces y un consumo de 12W cada hora. A continuación calcular cuánto tiempo las tendríamos puestas. Si, por ejemplo, decidimos tenerlas encendidas 12 horas al día durante 30 días estas Navidades, serían 360 horas. Si multiplicamos ambas cantidades (12W x 360h) nos daría 4.320 Wh y si lo pasamos a Kilovatios (kW), dividiéndolo entre 1.000, ya que así es como viene el precio en la factura de la luz, nos darían 4,32 kWh. Este sería nuestro consumo total de luces del árbol para estas Navidades.
Una vez que sabemos el consumo, habría que ver el precio de la luz en nuestra factura, actualmente ronda los 0,19 euros por kWh, por lo que si multiplicamos nuestro consumo por el precio (4,32 kWh x 0,19 euros por kWh) nos da 0,821 euros
Si le añadimos los impuestos, el impuesto de electricidad que actualmente es el 0,5 % y el IVA ha sido rebajado hasta el 5 %. Por lo que habría que sumarle 0,045 euros. Lo que nos da un total de 0,866 euros.
Es decir, tener las luces de Navidad puestas 12 horas al día, durante 30 días nos costará unos 86 céntimos. Por lo que, el precio no puede quitarnos la ilusión de tener nuestro árbol encendido estas fiestas, a pesar de la subida del precio de la luz.
Una vez que hemos visto que el precio no es un problema para tenerlas encendidas las horas que queramos, los expertos de TK Home Solutions nos muestran las principales ventajas que ofrecen las luces LED:
1. No calientan
Las luces LED no tienen ningún tipo de peligro, se pueden tocar que no calientan, a diferencia de las antiguas incandescentes, por lo que no solo no hay que temer que los pequeños de la casa las puedan tocar sino que no hay peligro de incendio. Eso sí, mejor asegurarnos de que las compramos homologadas y que hayan pasado los controles de la Comunidad Europea.
2. No se funden, ni se rompen
Las bombillas LED están revestidas de una resina que las hace ser más resistente que el vidrio mientras que las incandescentes sí estaban recubiertas de vidrio evacuado que hacía que fuera más sencillo romperlas. La gran resistencia de las luces LED hace que aguanten altas y bajas temperaturas, por lo que, las de exteriores son ideales para balcones o terrazas. Además, se funden con menor facilidad y si una falla el resto siguen funcionando.
3. Tienen una larga duración
Según los expertos las luces LED pueden durar unas 50.000 horas, mientras que las incandescentes duraban 1.000, las alógenas 3.000 y las de bajo consumo 15.000. Esto significa que si compramos este año unas luces y las ponemos durante 16 horas cada día, 30 días cada Navidades, ¡nos durarán 104 años!
4. Son más luminosas y contaminan menos
El color de la luz fría es más luminoso que el cálido y además, se calcula que reducen las emisiones de CO2 en un 75 %.