Cangas del Narcea, 28 de septiembre de 2022. La villa de Cangas del Narcea se ha convertido durante estos días en una de las cinco sedes asturianas que acoge el 41º Campeonato Mundial de Pesca sin Muerte. Los pescadores de los 23 países participantes se pasan cada día, entre las 10 y las 14 horas, por el río Narcea, para llevar a cabo esta competición, que está liderando la selección española.

Para vigilar que los participantes cumplen las normas, 25 voluntarios, 8 mujeres y 17 hombres, hacen la labor de controladores-jueces. “Nuestro trabajo es controlar a los pescadores y cuando hagan una captura la tenemos que medir para comprobar que no mide menos de 20 centímetros y apuntarla para llevar el recuento”, ha explicado la joven María del Carmen Álvarez Martínez.

“Como necesitaban gente nos apuntamos encantadas para colaborar”, explicaba a pie de río María José Sánchez, quien detalló que para realizar esta labor tuvieron que acudir a unas jornadas formativas, “nos enseñaron a medir, a anotar los tamaños, a controlar al pescador y a mirar que el anzuelo utilizado no sea para pesca con muerte”. Los controladores se muestran encantados de llevar a cabo este trabajo, “es una oportunidad única”, decía el veterano pescador Manuel Fidalgo ‘Loli’, que a sus 73 años está encantado de formar parte de este mundial, “son pescadores muy buenos, de los cuales aprendo”. A Fidalgo le ha llamado la atención el pequeño tamaño de las moscas que utilizan, y cree que el río Narcea, no está en su mejor momento, “le falta algo de agua y las truchas no empiezan a picar hasta las 12, las bajas temperaturas de estos días pueden influir”, ha detallado esta mañana, mientras controlaba al pescador estadounidense.

La emoción de este mundial de pesca se vive cada jornada en los diferentes tramos del río Narcea, “no sabemos qué selección nos va a tocar cada día”, explicaba Fidalgo, quien a pesar de su edad, habla con los pescadores, “traducimos con el móvil, me descargué una aplicación que funciona muy bien”, relataba al tiempo que se mostraba agradecido con los pescadores de Sudafrica, Mongolia y Estados Unidos a los que le ha tocado controlar durante estos tres días. Y es que, los participantes siempre tienen un detalle con los jueces, “me regalaron un imán con camellos y una ginebra de Mongolia, un pin de Sudáfrica y una gorra con la insignia de Estados Unidos”, relataba ‘Loli’, quien ha explicado que, “cuando pescan una trucha pegan un grito como cuando la selección de fútbol marca un gol”, ha dicho emocionado.

Un mundial que es una oportunidad única para visibilizar este deporte, y dar a conocer las bondades del río Narcea. Por este motivo, desde la concejalía de Turismo, entregan cada jornada a los pescadores una bolsa con información turística del concejo, con el objetivo de dar a conocer el municipio y que Cangas del Narcea se conozca en los 23 países participantes en el mundial.