El Gobierno de Asturias defiende una armonización fiscal que establezca unas reglas básicas a nivel nacional y permita a las comunidades adoptar decisiones sobre los tributos sin eliminar su autonomía. “Muchos de los tributos sobre los que tenemos capacidad normativa son cedidos, es decir, son tributos estatales. Por tanto, debe ser el Estado el que tenga la iniciativa para establecer cuál debe ser esa armonización. Se trata de fijar unas reglas básicas y mínimas en función de las cuales nosotros podamos tomar decisiones”, ha explicado la consejera de Hacienda, Ana Cárcaba.
A su juicio, la fiscalidad es una cuestión “de mucho calado” que exige una visión estratégica y a largo plazo. “La postura del Principado no ha cambiado: defendemos un sistema tributario progresivo, redistributivo y justo como el nuestro, que cuenta con figuras que no solamente implican recaudar recursos para financiar los servicios públicos, sino también reducir la desigualdad y la brecha social”, ha indicado.
Cárcaba, que hoy se ha reunido con la directiva del Clúster TIC para conocer el trabajo que desarrolla este colectivo, ha recordado que el próximo lunes, día 26, comenzarán las conversaciones con los grupos parlamentarios para pactar los presupuestos autonómicos de 2023. En este sentido, ha agradecido la disponibilidad de la práctica totalidad de las formaciones políticas “para negociar y acordar”.
“El proyecto que pondremos sobre la mesa será de cariz social y progresista y tendrá su punto clave en la inversión social, lo que no implica dejar a un lado la inversión productiva, que se ha ido incrementando a lo largo de la legislatura”, ha señalado la consejera. Como aspectos fundamentales de las cuentas para el próximo año ha citado el impulso a la gestión de los fondos europeos, la lucha contra el reto demográfico y la apuesta por las políticas de juventud.