Asturias.-Caja Rural de Asturias celebró este martes su Asamblea General Ordinaria en Oviedo, en el Palacio de Exposiciones y Congresos Ciudad de Oviedo “Edificio Calatrava”. Previamente al inicio de la asamblea, el presidente de la entidad, Fernando Martínez, resumió el balance positivo de la misma destacando que “las cifras que tenían que subir, así lo hicieron y las que tenían que bajar, bajaron. Ha sido un buen año”.
También, Antonio Romero, director de la Caja, quien hizo hincapié en la búsqueda por la entidad de talento en Asturias para su crecimiento mediante nuevas incorporaciones-- sumamos para multiplicar”-- repasó el actual escenario económico, con incertidumbres como un posible aumento de la morosidad en el semestre final del año, atendiendo a la evolución inflacionaria, una posible retracción del consumo o el alza de los tipos de interés, pero también certezas como la de que el ahorro de las familias, que aumentó durante la pandemia, dibuja un escenario más favorable que al inicio de la crisis de 2008.
Caja Rural de Asturias inició este ejercicio con unos resultados muy satisfactorios y mantiene la tendencia de crecimiento de su actividad comercial en todas sus líneas de negocio. Con un 2,01% más de beneficio líquido que el registrado en el ejercicio anterior, el resultado antes de impuestos alcanzó los 11,5 millones de euros, cifra que supone un incremento del 6.94%.
Todos los márgenes de la cuenta de resultados mejoran respecto a las cifras del ejercicio anterior. Este crecimiento acredita la solidez de la estrategia multicanal de la Caja y su proyección de cara al futuro. El margen de intereses alcanza al cierre del trimestre los 18,58 millones de euros. En cuanto al margen bruto, con un alza del 6%, refleja el fuerte impulso comercial y se sitúa en 25,28 millones de euros.
Actividad comercial
La Caja mantiene la senda de crecimiento rentable exhibida durante el 2021 focalizando su actividad en todos sus ámbitos de actuación, con un especial esfuerzo y dedicación al sector agroalimentario y las áreas de banca privada y de empresas. Este impulso comercial ha logrado la incorporación de 5.479 nuevos clientes, de los que 807 han sido empresas y 552 autónomos y profesionales.
Se han formalizado hasta el 31 de marzo 3.560 operaciones de financiación con un importe acumulado de más de 133 millones de euros lo que supone un incremento del 13% respecto al mismo periodo del 2021.
Cabe destacar el fuerte incremento de las financiaciones de vivienda, con un 46% respecto a Marzo 2021 alcanzando los casi 72 millones de euros.
Volumen de negocio
El crecimiento en las distintas de las líneas de negocio afianza el ambicioso objetivo planteado para el ejercicio en curso, alcanzando a 31 de marzo los 8.368 millones de euros en volumen de negocio, un 9,14% superior al registrado en el mismo periodo de 2021.
Los depósitos de los clientes se sitúan en 4.691 millones de euros, con un alza del 8,36%. En cuanto a la inversión crediticia culmina el trimestre en 2.913 millones de euros, un 9,92% más que hace un año. Los recursos fuera de balance obtienen un crecimiento del 11,02% y los activos totales de Caja Rural de Asturias superan los 5.971 millones de euros, un 7,09% más.
Ratios de gestión
Los principales ratios de gestión de la Caja reflejan la solidez de la entidad, destacando la mejora de la morosidad que se reduce hasta el 2,12% y el coeficiente de solvencia (CET1) que se sitúa en el 25,24%.