- El Ejecutivo aprueba un decreto que crea dos nuevas categorías para estos alojamientos: los destinados a peregrinos del Camino de Santiago y los asociados a la práctica del surf
El Gobierno de Asturias actualiza la normativa que regula los albergues para dar respuesta a las nuevas necesidades del sector, mejorar la calidad de los servicios que se prestan y fortalecer la oferta turística regional. El Ejecutivo ha aprobado hoy un nuevo decreto que sustituye a la normativa de 2002 e incorpora dos categorías adicionales para estos alojamientos: los destinados a peregrinos del Camino de Santiago y los asociados a la práctica deportiva del surf, que se añaden a las de albergues rurales y de montaña, ya existentes.
La creación de la figura de establecimientos vinculados específicamente a las rutas jacobeas cumple un doble objetivo, ya que responde a un mandato de la Junta General, al tiempo que trata de impedir la competencia ilegal dentro del sector. La categoría dedicada al surf también tiene su explicación: es una práctica de turismo activo vinculada mayoritariamente al alojamiento en albergues.
Por otra parte, el decreto actualiza los requisitos técnicos que deben cumplir estos establecimientos. Así, recoge los servicios mínimos que han de incluir, tales como la exigencia de un sistema de calefacción suficiente tanto en las dependencias de uso general como en las habitaciones, la limpieza diaria de las estancias y zonas comunes o la disponibilidad de armarios o taquillas suficientes para que cada persona pueda guardar bajo llave sus efectos personales. Igualmente, se demandan servicios de acceso a internet vía wifi en las zonas comunes, salvo en aquellos casos en que no sea posible técnicamente.
El alojamiento en albergues responde a demandas relacionadas con el disfrute de la naturaleza, uno de los pilares de la Estrategia de Turismo del Principado de Asturias 2020-2030. Este nuevo decreto supone un paso más en la ordenación de la oferta mediante el incremento de la calidad de servicios, instalaciones y equipamientos.
El Ejecutivo confía en que esta nueva norma permita también ahondar en la senda de recuperación de visitas y estancias que ya se percibe en Asturias. El Principado recibió en el primer cuatrimestre del año a 422.613 turistas que generaron 896.399 pernoctaciones. Estos datos son cinco veces superiores a los registrados entre enero y abril del año pasado y se sitúan en niveles similares a los de 2018 y 2019.