El Ayuntamiento no cobra esta tasa desde 2018 y cuando lo logre recaudará un 50% menos, pero ya ha perdido lo correspondiente a 2019, 2020 y 2021.

El Consistorio califica de “injusto” el cambio de criterio del Tribunal sobre los diferentes tipos impositivos obligando a establecer en 2020 dos tipos diferentes de tasas que en 2016 eran sólo una.

La lucha de los ayuntamientos, entre los que se incluye el de Morcín, logró en 2016 el aval del Tribunal Supremo al informe técnico económico que justificaba las tarifas que aplican los municipios, la denominada “Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa por Utilización Privativa o Aprovechamiento especial del Dominio Público de las Instalaciones de Transporte de Energía Eléctrica”. Es decir, el canon que han de satisfacer las compañías eléctricas a los consistorios por el uso del suelo público.

 Tras años de lucha, el ayuntamiento de Morcín logró la aprobación de esta Ordenanza en el año 2018, “por sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia”, explica el regidor Mino García. Pero sólo lo cobró este año.

 En 2020 el Tribunal Supremo volvió a avalar la Ordenanza introduciendo un cambio de doctrina en el tipo impositivo, “obligando a los Ayuntamientos a introducir dos tipos diferentes, uno para los elementos como torres, cajas, canalizaciones de agua y gas, del 5 % y otro para los tendidos o cables por considerar que ocupan menos terreno y es un aprovechamiento menos intensivo”.

 Este cambio de criterio ha obligado al Ayuntamiento de Morcín a modificar la ordenanza y adaptarse a las exigencias del Tribunal Supremo, “en un intento de que se zanje el asunto y se puede cobrar de nuevo la Tasa después de perder estos años”, explica el alcalde, Mino García.

Un cambio de criterio que desde la corporación se ve como injusto “ya que se podía haber establecido en 2016 y no esperar a 2020 excusándose en que es un debate nuevo”. Un ir y venir del Alto Tribunal que perjudica a Morcín ya que ha dejado de ingresar el cobro de la tasa desde 2018 “el único año que la cobramos” y que cuando consiga acceder a estos ingresos – a partir de 2021- verá disminuido en un 50 % la cantidad recaudada por esta tasa a las compañías eléctricas.

“Lo que dejamos de cobrar en estos años supera los 30.000 euros de perjuicio causado al Ayuntamiento de Morcín”, evalúa el alcalde.