- El incremento en las bonificaciones por la rehabilitación de viviendas protegidas es otra de las novedades para este año
La campaña de la renta 2021, que comienza hoy, presenta una serie de nuevos beneficios fiscales en Asturias, fruto de las medidas aprobadas en el presupuesto del Principado del año pasado. De este modo, los contribuyentes que cumplan los requisitos podrán acceder a las nuevas deducciones, concebidas para atraer y retener talento y fijar la población en las zonas rurales, así como beneficiarse de una mejora de las ya existentes.
Así, en la presente campaña entran en vigor dos nuevas deducciones que se plantearon con el fin de retener y a la vez atraer a trabajadores especialmente cualificados. Podrá aplicarse esta deducción, de hasta 2.000 euros, a aquellas personas que fijen su domicilio en Asturias e inicien su actividad profesional en la comunidad. Igualmente, resultarán beneficiarios los contribuyentes que se incorporen al mercado laboral en trabajos relacionados, directa y principalmente, con actividades de investigación y desarrollo, científicas o de carácter técnico.
Del mismo modo, se intensifican las medidas puestas en marcha en 2020 y dirigidas a fijar población en el medio rural. Entre las novedades dirigidas a los residentes en zonas rurales en riesgo de despoblación, destaca la creación de una deducción del 10% de la inversión efectuada para la adquisición o rehabilitación de vivienda habitual, aplicable a contribuyentes de hasta 35 años, familias numerosas y monoparentales.
Los residentes en estas zonas disfrutarán, asimismo, de una mejora en los porcentajes de deducción por el arrendamiento de la vivienda habitual –que se eleva hasta el 20%, frente al porcentaje general del 10%– y en los gastos por descendientes matriculados en centros de 0 a 3 años, que se eleva del 15% al 30%. Además, se duplica la cuantía deducible correspondiente a gastos de transporte, al pasar de 50 a 100 euros.
Por último, en el ámbito de la vivienda y para todos los contribuyentes, se mejora la deducción por adquisición o rehabilitación de vivienda habitual que tenga la consideración de protegida, fruto del acuerdo de concertación social. El importe de la deducción podrá alcanzar los 5.000 euros, frente al límite de 113 aplicable hasta 2020.