-        Los productos deberán mostrar tanto el precio original como el que resulta después de haber aplicado el descuento

-        En las adquisiciones por Internet se dispone de un plazo de devolución de 14 días

El Servicio de Consumo de la Agencia de Seguridad Alimentaria, Sanidad Ambiental y Consumo recomienda realizar durante la temporada de rebajas una compra responsable, sin caer en adquisiciones compulsivas de productos que no se necesiten. Por ello, aconseja elaborar una lista con lo que realmente se precise y ajustarse al presupuesto previsto.

Los productos adquiridos durante este periodo de descuento deben especificar en la etiqueta el precio anterior y el rebajado. Además, han de incluir una garantía legal, igual que cualquier artículo nuevo comprado en otro momento. En el caso que el producto no precise el período de garantía legal, ésta alcanzará tres años.

El Servicio de Consumo, dependiente de la Consejería de Salud recomienda también fijarse en la rebaja aplicada, ya que algunos productos presentan descuentos poco significativos y pueden encontrarse en otras promociones a lo largo del año. 

También sugiere no hacer un uso abusivo de las tarjetas de crédito para evitar sorpresas y poder hacer frente a los pagos los meses siguientes. Si el establecimiento admite el pago con tarjeta, no podrá aplicar ningún tipo de recargo por su utilización durante las rebajas.

Los establecimientos que anuncien rebajas deberán tener al menos la mitad de sus artículos con descuentos. Estos productos no pueden estar deteriorados o defectuosos, ni tampoco haber sido fabricados especialmente para este período, por lo que tendrán que haber estado previamente a la venta en el establecimiento. 

Los artículos con descuentos deberán estar claramente identificados y bien diferenciados y podrán coexistir con otros productos no rebajados o con otras ventas promocionales (ofertas, saldos...)

Una vez efectuada la compra es importante exigir y guardar el ticket o factura, al ser imprescindibles para cualquier reclamación o para hacer efectiva la garantía en el caso de que el producto presente algún defecto.

No existe obligación legal de devolver el dinero o cambiar el artículo comprado, salvo que sea defectuoso. Por esta razón, es conveniente consultar la política de devoluciones de cada establecimiento, así como los plazos, las condiciones y si se devuelve el dinero o se da un vale canjeable.

Precauciones ante el comercio electrónico

El comercio electrónico se consolida en los hábitos de consumo y año tras año experimenta un notable crecimiento, por lo que conviene tener en cuenta que estas compras hacen al usuario más vulnerable ante posibles engaños o estafas. En este sentido, Consumo recomienda verificar las condiciones de seguridad de la página y comprobar que la barra de direcciones empieza por https://, con la “s” de seguridad, o que tiene el símbolo del candado o llave.

Además, es importante desconfiar de ofertas a precios muy rebajados y consultar las opiniones de otros usuarios sobre el vendedor. Al realizar una compra por Internet se dispone de 14 días para devolver lo comprado sin sufrir ninguna penalización.

Reclamación de derechos

En caso de tener un problema, se debe intentar solucionarlo amistosamente con el establecimiento. De no poder llegar a una solución satisfactoria, se puede solicitar la hoja de reclamaciones, que el establecimiento tiene la obligación de facilitar, y acudir a cualquier Oficina de Información al Consumidor (OMIC) o al Servicio de Consumo de la Agencia de Seguridad Alimentaria, Sanidad Ambiental y Consumo para asesorarse y presentar la correspondiente reclamación.

El Servicio de Consumo recuerda que comprar en los establecimientos adheridos al Sistema Arbitral de Consumo garantiza una solución amistosa, rápida y gratuita de las potenciales reclamaciones.