Si no has ido al gimnasio durante la Navidad, después de dos semanas, quizá te dé pereza o ni siquiera encuentres el momento de volver. A continuación te acercamos algunas claves y detalles para preparar tu cuerpo frente a este momento que, a menudo, se hace duro.

Cuando llega el final de las vacaciones de Navidad y, con él, la vuelta a la rutina, es el momento perfecto de recuperar los buenos hábitos, entre los que se encuentran ir a un buen gimnasio, como es el caso de Sparta Sport Center o seguir una dieta sana y equilibrada. 

Empieza de menos a más

Para no caer en el desánimo pronto no se ha de cometer uno de los errores que más se repite. Y es volver a retomar la actividad, y en algunos casos incluso iniciarla, realizando desde el primer momento ejercicios de mucha intensidad y de duración prolongada. La vuelta al gimnasio siempre ha de ser progresiva, puesto que el cuerpo estará algo oxidado y necesita adaptarse de nuevo a estas rutinas. Para ello necesitará un periodo de adaptación que puede ir entre la semana y los 20 días, en función del caso concreto.

Establece una fase de adaptación

Es importante establecer una fase de adaptación. No es lo más recomendable volver al gimnasio, tras dos semanas de descanso por la Navidad, con la misma intensidad que antes porque puedes acabar padeciendo dolores musculares e incluso sufrir contracturas o distensiones. Para evitar esto es importante siempre apostar, precisamente, por la fase de adaptación que te permita lograr el fondo físico anterior. De tal modo que si sueles ir al gimnasio, por ejemplo, cuatro veces a la semana comiences yendo dos días, para luego pasar a tres y así.

Si, generalmente, el tipo de ejercicio que realizas está vinculado a entrenamientos con peso libre, lo mejor que puedes hacer es apostar por repeticiones de entre 15 y 20, eso sí, siempre con un tipo de carga ligera que pueda oscilar en lo que representaría el 65-70% de la fuerza máxima. Además, es importante saber repartir las tablas de ejercicios para ir trabajando de manera alterna los grupos musculares del tren superior y los del tren inferior.

Hacer circuitos completos

Para recuperar la forma física más rápidamente y el nivel que pudieras haber alcanzado antes de Navidad, puedes apostar por un circuito cerrado que te permita trabajar de ese modo los músculos dorsales, pectorales, los cuádriceps, isquiotibiales y abdominales, entre otros. Para ello puedes apostar por hacer un circuito con tres vueltas de 15 repeticiones. Modera la velocidad al punto que más cómodo te sientas. En cualquier caso, será una cantidad suficiente como para sentirte cómodo.

Cuidar la alimentación

En Navidad la alimentación no es precisamente algo que se cuide. Los excesos aparecen de manera casi irremediable y es importante volver a retomar una dieta sana y equilibrada lo antes posibles. En este sentido, se ha de tener presente que, precisamente, uno de los errores más frecuentes, pasa por volver a retomar las rutinas deportivas y comenzar a realizar dietas hipocalóricas de poca duración. Es fundamental para evitar esto tener claro qué tipo de alimentación sana y equilibrada se va a seguir no sólo durante un tiempo sino de manera continuada para lograr resultados.

Recomendaciones adicionales

En ocasiones ir al gimnasio se hace cuesta arriba por la falta de motivación. Para evitar que todo esto suceda será tan fácil como tener en cuenta, más allá de los tips arriba descritos una serie de puntos adicionales.

El primero de ellos es escoger un deporte o disciplina que realmente te motive. Más allá de apostar por algo que te sirve para trabajar, especialmente, la zona que quieres es importante que selecciones una disciplina que te gusta. Puedes encontrar diferentes modalidades de clases dirigidas, quizá prefieres máquinas, apostar por las salas de musculación, etc. En cualquier caso, si no escoges lo que te gusta te cansarás antes y, por tanto, será más difícil que puedas lograr los resultados que esperas.

Haz un hueco en tu agenda inamovible para ponerte en forma. Todos tenemos poco tiempo y, por ello, es especialmente importante que liberes huecos para dedicar este tiempo para ti. En concreto, para estar en forma y conseguir estar bien por fuera pero también por dentro. Si no tienes tiempo y tienes que ir buscando huecos resultará mucho más difícil ir.