• Han sido adjudicadas a Cabero Edificaciones SA por 306.841 euros y durarán cinco meses

• Se restaurará y recuperará tanto el monumento, de 1786, como la zona peatonal en la que se ubica, con el fin de mejorar su uso como área estancial

Las obras para la rehabilitación del monumento de Los Canapés y su entorno comenzarán en diciembre. La empresa Cabero Edificaciones SA será la encargada de su materialización durante un plazo máximo de cinco meses, gracias a una inversión de 306.841 euros cofinanciados en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), al tratarse de una actuación incluida en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) de Avilés. 

El monumento de Los Canapés está formado por dos bancos construidos en 1786 con piedra de la cantera de Bustiello por el arquitecto y escultor asturiano José Bernardo de la Meana Costales.

De las 14 líneas de actuación que componen la EDUSI de Avilés, la número 9 está dedicada específicamente a "Acciones de regeneración urbana para consolidar el patrimonio histórico-cultural de Avilés". Es en esta línea de actuación donde se enmarca la recuperación del monumento de Los Canapés.

El proyecto arrancó el mes de mayo de 2020 con la ejecución del estudio petrológico previo, realizado por la empresa GEA Asesoría Geológica, por un importe de 4.235 €. Las labores consistieron en la toma de datos y el análisis del estado del monumento, con el objetivo de guiar las posteriores actuaciones en materia de conservación.

Con este informe como base se dio el siguiente paso: la redacción del proyecto de rehabilitación. El contrato para su elaboración fue adjudicado a Álvarez Arango Arquitectos SLP, por importe de 11.825 €. El proyecto resultante fue remitido ya a la Dirección General de Cultura y Patrimonio, organismo que dio su visto bueno al proyecto el pasado mes de septiembre.

La actuación proyectada comprende los siguientes trabajos:

• Consolidación del monumento utilizando la técnica “kintsukuroi” que consiste en la reparación lo dañado sin ocultar las cicatrices, no tratando de unificar, y respetando, en la medida de lo posible, la belleza del paso del tiempo. Se diferenciará lo nuevo de lo viejo sin ocultar la reparación, pero también sin resaltar las fisuras, cuyos huecos se rellenarán con piedra cuando sea posible.
• En lo referido a volúmenes pétreos perdidos, cuando éste corresponda a un elemento funcional, protector o cuando la pérdida sea considerablemente elevada, se recuperará el volumen perdido siguiendo las prescripciones marcadas en el Estudio Petrológico, como ocurre en el banco suroccidental del que se recuperarán las piezas de los brazos perdidos.
• Resaltar la condición de estancia, recuperando este enclave como un alto en el camino sustituyendo el pavimento central por adoquines de granito, a modo de pequeña plaza.
• El resto del camino se adecuará con un acabado de hormigón lavado buscando una granulometría gris que, con afinidad, se unirá al puente. De esta manera se unificará el piso hasta la escalera y a la calle en el otro extremo, resaltando con coherencia la estancia.
• Las barandillas existentes se pintarán de gris grafito.
• Se podarán los árboles próximos para evitar daños al monumento.
• El nuevo muro proyectado será fiel copia del existente en el otro lado del vial. tendrá 33 metros de longitud, medio metro de ancho y otro medio metro de alto y discurrirá en continuidad hacia el sur, con formación de tres bancos de madera,.
• No se alterará o modificará ninguna instalación existente, excepto la incorporación de los cuatro postes y luminarias definidos en el proyecto. En la medida de lo posible se actuará sobre las tapas y registros situadas en el ámbito delimitado.
• Se efectuarán probaturas de color y textura.
• Se implantará una barrera física que impida o minimice la colonización de plantas herbáceas y leñosas en el banco nororiental.