Según una encuesta realizada por Emma – The Sleep Company a más de 1.200 suscriptores en España, el 61% de los españoles consideran que duermen más en los meses de invierno, entre diciembre y marzo, frente al 11% de los encuestados que afirman que duermen más en verano, entre los meses de junio y septiembre. El 28% restante, por su parte, indica que no es consciente de en qué época del año duermen más.

De entre las principales razones por las que los españoles duermen más en invierno, el 58% destaca el exceso de calor como causa principal para conciliar peor el sueño en verano, mientras que el 26% asegura que al ser los días más largos y tener más actividad durante el día, se reduce el tiempo para dormir. Por su parte, un 8% apunta al menor ocio en invierno y, por tanto, más tiempo para dormir, mientras que otro 8% alude a que al no dormir siesta en invierno duerme más durante la noche.

De entre el 11% que asegura dormir más en verano, la mayor parte (63%) afirma que la razón principal es el disfrute de las vacaciones, pues pueden dormir más y el 22% asegura que aprovecha para echarse también la siesta. Otro 14% afirma que necesita descansar más horas porque se despierta más durante las calurosas noches estivales, y un curioso 1% asegura que hace tanto calor en verano, que lo único que puede hacer es dormir. La mitad de estos encuestados (51%) asegura que en verano duerme una media de 2 horas más que en invierno, mientras que una cuarta parte (26%) afirma que solo descansa 1 hora más.

Si bien las horas de sueño pueden ser diferentes según la época del año, las rutinas para antes de acostarse no suelen variar: el 77% asegura ver la televisión o consultar el móvil (Internet, redes sociales...), muy en línea con el denominado screen pollution, término que hace referencia al uso excesivo de los dispositivos en los más jóvenes. Por otro lado, solo el 14% prefiere leer un libro. Otros encuestados afirman escuchar podcasts, música o la radio.

Consultados sobre cómo creen que les afectan las preocupaciones de su vida personal y profesional en su descanso nocturno, la mayoría afirma sentirse afectados, aunque de diferente manera: el 32% asegura que le influyen bastante; el 24% afirma que le afectan demasiado; el 23% reconoce que algo le influyen; y un 16% asegura que las preocupaciones determinan su descanso. En el lado opuesto, el 6% que asegura que las preocupaciones de su vida personal y profesional no le quitan el sueño.

La siesta es para el verano

La siesta sigue siendo muy popular entre los españoles, sobre todo en verano. El 32% de todos los encuestados afirma echarse la siesta habitualmente entre los meses de junio a septiembre y el 39% reconoce que lo hace a veces.

Consultados sobre el lugar preferido para echarse la siesta, el sofá y la cama están muy igualados. La cama ocupa la primera posición con un 47% de votos, seguida muy de cerca del sofá con un 46% de las respuestas.