El calor y el sol del verano nos afecta a todos, especialmente a la hora de vestir, buscamos las prendas más ligeras y cómodas posibles para poder soportar las altas temperaturas en nuestro día a día, algo que algunos moteros también hacen no llevando casco o guantes, utilizando pantalones y camisetas cortas o yendo descalzos o con chanclas, poniendo, en muchas ocasiones, en riesgo su integridad física en caso de sufrir un accidente. Y es que, según datos que maneja www.amv.es, la empresa líder en la comercialización online de seguros de motos, más de la mitad de las abrasiones que sufren los moteros en el año se concentran en los tres meses de verano.
No podemos olvidar que, en una moto, tanto el cuerpo del conductor como el de su acompañante son parte de la carrocería de la moto en caso de un accidente o una caída, los pies, piernas, brazos y manos suelen ser las partes de cuerpo más afectadas y las que mayor contacto tienen con el asfalto cuando se produce un percance. Y si van desprotegidas, o no convenientemente cubiertas serán las que mayor daño sufran. Por ello, los expertos de AMV han recopilado una serie de consejos para que los moteros puedan ir seguros este verano sin pasar calor:
1. El Casco: modelos jet y modulares vs integrales
A pesar de que el casco de motorista es obligatorio por ley y que su no utilización, llevarlo mal abrochado o llevar uno que no sea homologado o certificado según la legislación vigente puede suponer, según la última reforma de la Dirección General de Tráfico (DGT), la pérdida de 4 puntos del carnet de conducir y una multa de 200 euros, todavía hay muchas personas que no lo utilizan en verano. Y ya no es solo la sanción que nos pueda caer por no utilizarlo, es que hay que concienciarse que el 65 % de los impactos que un motorista sufre en una caída se producen en la zona del rostro y que llevarlo puesto nos puede salvar la vida en caso de accidente. De hecho, su uso reduce las lesiones en la cabeza en un 70 % y la mortalidad en un 40 %.
Existen varios tipos de cascos que muchos motoristas eligen para sus trayectos en esta época del año debido a que son algo más frescos, como son los cascos modulares, los jet y los abiertos, pero ninguno de ellos proporciona la protección y seguridad de uno integral. Los expertos de AMV, además de recomendar siempre la utilización de este último frente a los otros han querido comparar los pros y contras de todos ellos:
Casco integral
Un casco integral está compuesto de una sola pieza, por lo tanto, se ajusta mejor a la cabeza, no se mueve al circular y no deja zonas sin protección, son mucho más aerodinámicos, y gracias a ello resultan más cómodos y seguros para conducir a velocidades elevadas. Además, debido a su forma ejercen menor resistencia al viento, lo que favorece a la estabilidad del conductor le ahorra tener que sufrir mayores esfuerzos en las cervicales. También evitan que el aire se cuele en el interior, disminuyendo los niveles de ruido cuando estamos circulando.
Casco modular
Por su parte los cascos modulares están formados por dos piezas, la que cubre la mandíbula inferior suele ser abatible, se unen por medio de un mecanismo de apertura y cierre que permite subir la parte de abajo por encima de nuestra cabeza. Si este mecanismo no está en buen estado y ambas piezas no están bien ensambladas, repercutirá negativamente en la estabilidad y eficacia del casco. Además, son más pesados que los integrales. Muchos conductores aprovechan cuando están en los semáforos para subirlos y poder tener algo más de aire para después volverlos a bajar, provocando una continua distracción que no es recomendable cuando circulamos, otros olvidan bajarlos al ponerse en marcha, disminuyendo su protección y arriesgándose a ser multados si circulan así y el casco no tiene la doble homologación. También hay cascos modulares en los que esta parte de abajo se puede quitar convirtiéndose así en un casco abierto o jet.
Casco abierto o jet
Son los que no tienen parte de abajo que cubra la mandíbula inferior, y aunque sean los más frescos, son los menos recomendables en cuanto a seguridad, ya que esta parte queda desprotegida en caso de accidente y hay que recordar que el 35 % de los impactos sufridos por los motoristas se producen en la zona de la mandíbula. Se pueden utilizar en ciudad y para trayectos cortos pero mejor no hacerlo en carretera o autopista en recorridos más largos.
Por lo tanto, si buscamos seguridad ante todo, el casco integral es el único que protege cabeza y rostro por completo, existen modelos con grandes rejillas y orificios de ventilación especiales para el verano.
2. Los guantes
Los guantes de moto no son obligatorios todavía, y aunque la DGT propuso que lo fueran, en la última modificación del reglamento del 26 de marzo de este año no se ha incluido esta medida, pero se cree que a medio plazo lo serán, siguiendo los pasos de Francia, donde, por cierto, sí que lo son. Por lo que no está de más ir pensando en comprar unos, empezando por este verano, pero no valen unos cualquiera, tienen que ser específicos de moto. Y es que, cuando circulamos en moto, nuestras manos suelen ser las primeras en sufrir en caso de accidente, y más si se produce a baja velocidad, ya que, por instinto, las utilizamos para amortiguar el impacto cuando caemos al suelo, si no llevamos guantes nos arriesgamos a sufrir cortes, arañazos, abrasiones, quemaduras, moratones, contusiones y todo tipo de fracturas.
Afortunadamente hay multitud de guantes de moto que se pueden encontrar con muy buena relación calidad-precio, los hay de invierno, de entretiempo, para ciudad, para carretera, para realizar deportes... y por supuesto, los hay de verano. Si en invierno en lo que debemos fijarnos es que nos protejan del frío y de la humedad de la lluvia, en verano, como hemos visto, lo que más preocupa es el calor, que hace que nos suden las manos por lo que deberemos fijarnos en que sean ligeros, transpirables y con buenos orificios de ventilación. Pero, además, no nos podemos olvidar de la seguridad y deben de proporcionarnos una óptima protección en los dedos, nudillos, la palma de la mano y muñecas, que queden bien ajustados y que sean aptos para pantalla táctil, ojo, hay que recordar que está prohibido usar el móvil mientras conducimos. Pero sí podemos utilizar el GPS u otros dispositivos electrónicos antes de ponernos en marcha. Por cierto, los expertos de AMV desaconsejan el uso de guantes cortos que dejan la mitad de los dedos al descubierto ya que en caso de caída no ofrecen mucha protección.
3. Chaquetas y pantalones
En verano es muy habitual ver circular a conductores de moto con camiseta y pantalón corto y puede que vayan frescos, sin embargo, nada seguros. Hay que recordar que, en caso de la más mínima caída, el asfalto actúa como una lija con nuestro cuerpo, por lo que no hace falta saber mucho para imaginar lo que puede hacer sobre nuestras piernas y brazos si van descubiertos, incluso si tratamos de protegerlos, pero no con las prendas adecuadas especiales para moto. Y es que, mientras que un pantalón vaquero o una cazadora vaquera protegen aproximadamente un 60 y un 70 % respectivamente, utilizar unas de tejido kevlar especial para motoristas lo hacen en un 95 %.
También en esto existen modelos especiales para el verano. En cuanto a las chaquetas, lo primero que debemos de tener en cuenta es que nos protejan adecuadamente los hombros, antebrazos, codos, tronco y espalda y después el tejido, que sean ventiladas con entradas de aire en el pecho, los laterales y la espalda. Normalmente suelen ser de cordura, algo más económicas o de cuero, un poco más caras. Lo que sí que es imprescindible es que no nos queden anchas, ya que se moverán durante la marcha provocando el efecto vela y nos harán estar incómodos e incluso nos provocarán dolor, por lo que es fundamental que se ajusten bien en el cuello, muñecas, brazos y cintura.
Los pantalones largos especiales de verano también son importantes a la hora de protegernos ante una caída y de mantenernos frescos. Existen en el mercado multitud de tipos en función del material que estén hechos y de la utilidad que le vayamos a dar, los de cordura con ventilación son ideales para carretera, además suelen incluir protecciones en las rodillas, espinillas y caderas y suelen quitarse con cremalleras laterales por lo que podemos llevar debajo unas bermudas para quitárnoslos cuando lleguemos a nuestro destino y estar más frescos.
Otra opción, muy de moda actualmente, son los vaqueros de moto, confeccionados en tela vaquera o denim, a simple vista casi no se diferencian de los normales, pero en su interior tienen refuerzos, normalmente de Kevlar. Este tipo de pantalón es ideal para ciudad.
Actualmente la utilización de chaquetas integrales y de pantalones largos especiales no son obligatorios, pero al igual que pasa con los guantes, se está estudiando el que lo sean a medio plazo, también lo serán los chalecos con airbag.
4. Calzado
Por último, aunque no menos importante, el calzado, conviene recordar que nos pueden multar por conducir en chanclas o sandalias en verano, aunque su uso no esté prohibido como tal, es decir, la norma dice que los conductores deberán estar en todo momento en condiciones de controlar sus vehículos, por lo que un agente puede denunciarnos si considera que este tipo de calzado limita nuestra capacidad para controlar la moto y nuestra libertad de movimientos.
Para el verano existen botas de caña corta, que, además de ser muy cómodas, protegen hasta el tobillo y disponen de zonas reforzadas y, cómo no, perforaciones para ir más ventilados. Conviene señalar que utilizar zapatos, zapatillas o mocasines nos ofrece un factor de protección del 46 %, frente al 96 % de las botas especiales para motoristas.
Por último, es importante recordar que, si estamos pensando en sacarnos el carnet de moto, además del casco, el uso de guantes, chaqueta, pantalones y botas especiales ya es obligatorio en las pruebas de destreza y circulación para la obtención de los diferentes carnets, por lo que merece la pena comprarlos con vistas al futuro.