El Ayuntamiento otorga esta nueva nomenclatura a una vía de la ciudad, en el Bulevar de El Vasco, coincidiendo con el 90 aniversario del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Asturias. El Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Asturias dona a Oviedo una escultura de Herminio, “Equilibrio y Transparencia”, que luce ya en la Plaza de la Poesía.
Una inauguración multitudinaria y doble, coincidiendo con el 90 aniversario del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Asturias. Desde hoy, una de las calles del Bulevar de El Vasco lleva el nombre de Aparejadores y la plaza de la Poesía, a escasos metros, luce la escultura del artista asturiano Herminio, “Equilibrio y Transparencia", facilitada por el Colegio a la ciudad.
Los acordes de la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo arrancaron el inicio del acto de inauguración de la calle Aparejadores, en el Bulevar del Vasco. Descubrieron la placa el Alcalde, Alfredo Canteli, el primer Teniente de Alcalde, Nacho Cuesta, los portavoces de los grupos municipales, el presidente del Colegio de Aparejadores de Asturias, Joaquín Antonio Suárez y el presidente Consejo General de la Arquitectura Técnica de España, Alfredo Sanz.
Sanz ha asegurado que “es un honor inmenso para un representante de la profesión dirigirme a ustedes. Nos habéis hecho presentes en un espacio común. La calle Aparejadores siempre va a estar presente en Oviedo". La donación de la obra de Herminio, “Equilibrio y transparencia”, “evidencia que somos la fuerza que equilibra las ideas y la realidad. Somos necesarios y me alegra especialmente estar aquí en la Plaza de la Poesía, algo imprescindible para colectivizar ciertos sentimientos y pasar del conocimiento a la información”.
El presidente del Colegio de Aparejadores de Asturias, Joaquín Antonio Suárez, ha agradecido a los más de treinta representantes de los Colegios de España, a la Corporación y todos los asistenteste la "presencia en este acto tan importante para nosotros". “Nos onorgullece y nos motiva seguir mejorando la calidad de vida de los ciudadanos. Es un honor que una calle de nuevo cuño lleve el nombre de nuestra institución. Como muestra de agradecimiento nos honramos en donar a Oviedo esta obra de Herminio”.
El Alcalde, Alfredo Canteli, ha cerrado el acto con una intervención que ha comenzado con “un saludo muy especial al presidente del Consejo General de la Arquitectura Técnica de España, Alfredo Sanz Corma; al presidente del Colegio de Aparejadores de Asturias; así como a los presidentes de los Colegios de Aparejadores de toda España que se han reunido en Oviedo y ahora nos acompañan en este acto tan especial, y a los cuales doy la más cariñosa bienvenida(...) Ser Alcalde de una capital como Oviedo conlleva afrontar situaciones complejas que no siempre se resuelven como uno quiere o con la rapidez que se desea y que, por tanto, provocan preocupación. Pero también son muchos los momentos que te llenan de satisfacción. Y este de hoy es, sin duda, uno de ellos. Como Alcalde, me hace especialmente feliz inaugurar la Calle de los Aparejadores, a escasos metros de donde nos encontramos, así como la escultura del gran Herminio que ya preside esta Plaza de la Poesía, y que inauguraremos próximamente. Esta nueva calle, que acabamos de inaugurar, rinde un merecido homenaje al Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Asturias, que acaba de cumplir 90 años de vida. Enhorabuena. Y si me lo permitís, quiero felicitar con especial cariño al presidente del Colegio, Joaquín Antonio Suárez. Y, cómo no, a su secretario, y aparejador del Ayuntamiento de Oviedo durante más de 30 años, mi amigo Severino Vázquez. Porque sois dos de los principales culpables de que el Colegio de Aparejadores tenga desde hoy una calle en nuestra ciudad. Vuestra brillante labor, así como la de tantos grandes profesionales que han pasado por la institución en estos noventa años de historia, os ha convertido en uno de los Colegios de referencia en toda España. Con 975 aparejadores colegiados en la actualidad, poco tenéis ahora en común con aquella incipiente Asociación Regional que inició su andadura en 1931 con solo 12 miembros”.
Canteli ha continuado: “Aunque sí conserváis el espíritu innovador y el afán de superación de los primeros afiliados y que, desde luego, son inherentes a una profesión tan vocacional como la vuestra. A lo largo de los años, no solo ha destacado vuestra labor interna, sino también vuestra importante función social, vuestra gran aportación profesional al progreso de esta comunidad y vuestro compromiso con el resto de los ciudadanos. Por ello, como Alcalde, y como ovetense, os quiero agradecer tantos años de trabajo al servicio del sector y de toda la sociedad. Y no sería justo si no os diese también las gracias, pública y efusivamente, en mi nombre y en el de todo el Ayuntamiento que presido, por la donación a nuestra ciudad de esta escultura de Herminio que hoy inauguramos. Vuestra generosidad va a permitir que Oviedo cuente, por fin, en sus calles con una de sus obras, cuya relevancia artística está fuera de cualquier duda. Herminio, enhorabuena y gracias. Espero, de corazón, que no sea la última. Al principio de esta intervención, os confesé que el de hoy era un día feliz para mí; para vosotros, los aparejadores; y para todos los ovetenses. Y lo es por varios y buenos motivos”. Y el Alcalde los ha argumentado: “En los últimos meses, se ha hablado mucho de nuestro callejero e, incluso, nos han acusado de vulnerar la ley. Pero lo único que hemos hecho es acatar las sentencias judiciales y padecer los errores de otros, que tantos perjuicios han causado a los vecinos. Pronto vamos a cerrar este capítulo que llevamos ya demasiado tiempo arrastrando del pasado. Y lo haremos cumpliendo la ley. Acatando, aun cuando no estemos de acuerdo, las imposiciones del Principado de Asturias y tratando de minimizar los daños que tanto vaivén de placas y nombres está provocando a los vecinos. El equipo de Gobierno que presido ha trabajado duro, y seguirá haciéndolo en el futuro, para que el callejero de Oviedo deje de ser el escenario de una polémica ya absolutamente fuera de nuestro tiempo y se convierta en el lugar de máximo honor para reconocer a personas y colectivos de grandes valores. Vosotros, aquellos que formáis parte del Colegio Oficial de Aparejadores, y todos los que lo han hecho a lo largo de los años, sois un buen ejemplo de ello. Pero también me vienen a la mente Jaime Martínez, que ya cuenta con una plaza en su nombre, o Jaime Baladrón, que pronto tendrá una calle en las inmediaciones del HUCA. Así como Jaime Álvarez-Buylla Menéndez, Juan Ignacio Ruiz de la Peña o los sanitarios asturianos que se han dejado la piel en esta terrible pandemia a la que aún no hemos vencido del todo. No me gustaría finalizar mi intervención sin destacar la importancia del emplazamiento en el que nos encontramos. He de confesar que no se me ocurre ningún lugar mejor que este para ubicar la Calle de los Aparejadores.
Este complejo del Vasco es un enclave estratégico para el futuro de la ciudad que ha modificado por completo la entrada de Oviedo. Por eso, como Alcalde, no puedo más que agradecer el esfuerzo y el trabajo de todos aquellos que lo habéis hecho posible.
Como José Manuel Ferreira y el resto de promotores que le han acompañado en este proyecto y a los que algunos, entre los que me incluyo, tildábamos de locos en su día”…” no hace mucho tiempo – ha recordado- este espacio era una enorme cicatriz en el corazón de Oviedo. Un lugar sin esperanza hacia al que ni siquiera nos gustaba mirar. Pero hoy es un complejo en efervescencia, de gran belleza arquitectónica y de prometedores negocios a los que pronto se sumarán muchos otros. El Gran Bulevar del Vasco es la prueba definitiva de la modernización que se avecina en Oviedo. Y la más clara y firme demostración de la ciudad que queremos hacer. Un Oviedo más moderno, más innovador y con mayores alternativas empresariales y de ocio que girará en torno al gran polo que formarán estas instalaciones y otros espacios cercanos, como la Fábrica de la Vega y la Fábrica de Gas. Una necesaria y total transformación por la que los ovetenses llevamos demasiado tiempo esperando, pero que estoy seguro que pronto completaremos si continuamos trabajando unidos”.