Madrid, 25 de mayo de 2021. En primavera y con el verano a la vuelta de la esquina, los bebés y niños pequeños requieren de cuidados especiales tanto en la piel como en los ojos. A veces, los padres tienen dificultades sobre cómo abordar esa protección, al existir cierto desconocimiento acerca de qué productos pueden utilizar, especialmente en lo que a las molestas picaduras de mosquito se refiere.
En zonas de costa o próximas a ríos, es frecuente la presencia de mosquitos, lo cual hace muy molesto el paseo o la estancia de los niños en ambientes exteriores o interiores. Para combatir las picaduras de este incómodo turista, Gema Magdaleno, matrona de Atención Primaria y encargada de dar pautas a los padres para el cuidado de la piel de los bebés, nos ofrece algunos consejos:
- Evitar zonas húmedas con mayor concentración de este tipo de insectos, sobre todo en las primeras horas de la mañana y al atardecer, cuando su presencia es mayor.
- Vestirlos con ropa de colores claros y con la posibilidad de usar mangas y pantalones largos para mantener protegida la mayor parte de la piel. Optar por tejidos finos y ligeros cuando las temperaturas sean más altas.
- Evitar el uso de productos como geles o colonias con aromas intensos o dulces, ya que atraen a los mosquitos.
- Proteger las ventanas y puertas de los hogares colocando barreras físicas como mosquiteras y hacer uso de aires acondicionados, ya que estos insectos se sienten atraídos por el calor. Si el bebé todavía va en sillita o cuco, no olvidar protegerlo con mosquiteras de tela que sean transpirables. Las plantas aromáticas como la albahaca o la lavanda son excelentes repelentes naturales.
- A la hora de dormir, evitar tener luces encendidas, puesto que los mosquitos acudirán a ellas
- Hacer un uso correcto de protectores y repelentes, que deben aplicarse en diferentes situaciones y contar con una homologación específica. Deben ser especiales para niños, ya que de lo contrario pueden resultar tóxicos.
- Si a pesar de todas las precauciones, se produce una picadura en el niño (tarde o temprano ocurrirá), es importante mantener la calma. La mayoría de las picaduras tan solo producirán una reacción local (inflamación, picor y dolor) y no son realmente graves para la salud del niño. Si se produce, es recomendable lavar bien la zona y aplicar un producto específico para aliviar los síntomas. Por el contrario, es muy importante no aplicar remedios caseros como barro o dentífrico, ya que pueden llegar a producir infección. Tan sólo si se ve que el niño tiene otros síntomas como fiebre o malestar general, será preciso acudir al pediatra.
Diferencias entre protectores y repelentes de mosquitos
Los repelentes tienen compuestos químicos, sometidos a un riguroso control, que los permiten identificarse como tal, a diferencia de los protectores naturales que no incluyen fórmulas biocidas, por lo que pueden ser utilizados por menores de 12 meses. Los protectores naturales pueden aplicarse cuando resulte necesario, mientras que los repelentes tienen una frecuencia de uso más limitada.