La directora general de Energía. Minería y Reactivación, Belarmina Díaz, y el consejero delegado de Enagás, Marcelino Oreja, han coincidido hoy en la jornada Hidrógeno, fuente de energía alternativa y de futuro, celebrada en El Musel, donde ha expuesto las potencialidades y proyectos en los que actualmente está trabajando el Gobierno de Asturias en colaboración con empresas privadas y entidades expertas en el sector.
Díaz ha destacado que “el hidrógeno va a sumarse a las alternativas energéticas de futuro en Asturias”, aunque si bien “no será la solución al modelo energético, será una parte de esa solución”. Según ha explicado, el Principado tiene ventajas competitivas en el ámbito del hidrógeno al contar con consumidores industriales e infraestructuras eléctricas, energéticas, de gas e industriales “que nos permitirán generar hidrógeno”.
Este marco convierte a la región en un valle de hidrógeno, característica que puede facilitar la introducción de esta fuente de energía en el transporte (marítimo, ferroviario o por carretera) y contribuir a ganar competitividad en otros sectores, “apoyándonos en unas innegables fortalezas en toda la cadena de valor del hidrógeno basadas en la experiencia y el capital humano”.
Asturias ha presentado un proyecto región de H2 a la consulta pública de manifestaciones de interés lanzada por la DG Grow a través de la European Clean H2 Alliance, a partir de iniciativas recogidas en la mesa regional del hidrógeno mediante la coordinación de Faen. De ellas, se han integrado 19 proyectos impulsados por empresas en la región como TSK, Enagás, Naturgy, Imasa, Hunosa, Duro Felguera, Nortegas, Rioglass o EDP.
La propuesta es la creación de una red electrolizadores para la producción de H2 de origen renovable y su suministro a los sectores industrial, transporte y energético, agrupados en tres grandes bloques:
- Un primer bloque de más de 10 electrolizadores para producción de 180 MW de H2, alimentados con 530 MW de energía eólica (onshore y offshore), fotovoltaica o hidráulica, para el sector transporte o para inyectar directamente en la red de gas natural.
- Un segundo bloque está formado por 5 electrolizadores de 205 MW, conectados directamente a la red eléctrica, para almacenamiento energético y para mejorar la seguridad de suministro regional.
- Y un tercer bloque formado por 5 electrolizadores por 18 MW conectados a instalaciones industriales muy intensivas en energía.
El objetivo es conseguir en 2030 una red regional con una veintena de electrolizadores por casi 395 MW que produzcan H2 de origen renovable; que ponga en valor infraestructuras energéticas de la región, como la planta de gas de El Musel o los nudos de transición justa; y que ayuden a descarbonizar sectores como el industrial o el transporte pesado.