Reproducimos la intervención íntegra del Consejero Enrique Fernández:

Buenos días señorías.

Comparezco ante ustedes a petición propia para informar sobre la situación actual y la gestión de los asuntos relativos a los Fondos Europeos del Next Generation EU desde el ámbito de la Consejería de Industria, Empleo y Promoción Económica.

La Unión Europea ha decidido dar una respuesta excepcional a la crisis provocada por la pandemia, una respuesta radicalmente opuesta a la austeridad de la Gran Recesión y la reconcilia con el proyecto social y solidario que constituye su propia razón de ser. Este programa supone la mayor movilización de recursos en la historia de la Unión Europea que deberá permitirnos impulsar decididamente la actividad económica y el empleo para superar los efectos de la pandemia de la covid-19 y, al mismo tiempo, sentar las bases de un nuevo desarrollo económicamente más sostenible y digital, y socialmente más justo y cohesionado.

En consecuencia, las expectativas alentadas son proporcionales a la extraordinaria movilización de recursos prevista. El Gobierno de Asturias comprende el interés, la inquietud e incluso la ansiedad generada. También entiende las dudas consecuentes, casi obligadas. Y confío, por ello, en que esta comparecencia y las explicaciones que vamos a trasladar a esta cámara puedan tranquilizar a sus señorías.

El Principado asume el reto de liderar la transformación de Asturias con el mejor uso posible de los fondos de reconstrucción. A partir de la experiencia acumulada en gestión de programas europeos, estamos preparados, nos hemos dotado de la arquitectura institucional necesaria y contaremos con los medios suficientes para sacar el máximo provecho con toda la agilidad que sea precisa.

En el breve espacio de tiempo del que dispongo, 10 minutos, intentaré hacer un resumen del trabajo que estamos desarrollando.

En el momento actual, Asturias tiene una oportunidad única de aprovechar tanto el Plan de Recuperación para Europa, Next Generation EU, como el Marco Financiero Plurianual para afrontar el cambio en el modelo productivo, dirigido hacia una economía hipocarbónica, digital, a la vez que se construye una región más cohesionada y resiliente, tanto territorial como socialmente.

Por tanto, esta oportunidad debe contribuir decisivamente a dar una respuesta a los principales retos y desafíos de la región. Y para ello, el Gobierno del Principado de Asturias ha sintetizado en el Mapa de Estrategias todos sus planes de acción, y se ha dotado de una estructura de gobernanza en la que se insertan la Oficina de Proyectos Europeos y el Comité Asesor de Fondos Europeos.

Este Mapa de Estrategias, alineado con los principales planes y estrategias europeas y nacionales, define en Asturias tres grandes ámbitos de actuación o trabajo: economía verde y sostenibilidad; salud y longevidad y, en tercer lugar, cohesión social y territorial, y conectividad.

En relación con las numerosas estrategias diseñadas destacan dos por su relevancia y transversalidad.

La primera, la Estrategia de Especialización Inteligente (S3), que contiene las claves y los programas para la transformación económica de la región apoyada en sus potencialidades; y la segunda, la Estrategia de Transición Justa, que identifica las acciones para que dicha transición sea climáticamente neutra y socialmente sostenible.

En el caso concreto de la Consejería de Industria, Empleo y Promoción Económica, además de en la Estrategia de Transición Justa, estamos trabajando en cinco de carácter sectorial:

• Estrategia industrial 2030.
• Estrategia de Energía.
• Estrategia de Materias Primas.
• Estrategia para la Rehabilitación Energética de Edificios en Asturias.
• Estrategia de Comercio.

Me referiré brevemente a cada una de ellas.

La Estrategia Industrial 2030 tiene como objetivo consolidar y ampliar la actividad industrial en Asturias como motor de desarrollo económico regional, facilitar la adaptación a la doble transición ecológica y digital, y fomentar su capacidad de innovación y de internacionalización. Elaborada en colaboración con los agentes económicos, sociales y la Universidad de Oviedo, está muy avanzada y será presentada en este primer semestre del año cumpliendo el mandato de esta cámara.

La Estrategia de Energía. Constituye una hoja de ruta para la transición hacia un modelo de generación, transporte, distribución y consumo hipocarbónico; al tiempo que se trata de mantener en la región la capacidad de producción y el empleo asociados a los sectores energéticos, industriales, del transporte y residenciales. La estrategia, elaborada con el apoyo técnico de la UE, ya se encuentra en exposición pública para recibir aportaciones.

La Estrategia de Materias Primas. Tiene como objetivo posicionar a Asturias en la producción sostenible de materias primas, lograr mayor valor añadido en las mismas y aprovechar la experiencia y las tecnologías de producción y mineras que existe en Asturias. El documento base de la estrategia, elaborado por el Indurot de la Universidad de Oviedo ya ha sido recibido y en los próximos días se someterá a análisis y revisión de grupos de trabajo de expertos regionales.

La estrategia para la rehabilitación energética de edificios en Asturias. En sintonía con las líneas de acción europeas y nacionales, pretende convertir el problema de la elevada antigüedad y escasa eficiencia energética de los edificios asturianos en la oportunidad de, a través de un impulso decidido a las acciones de rehabilitación energética, lograr objetivos de lucha contra el cambio climático, de generación de actividad económica y empleo, y objetivos sociales y de salubridad. Elaborada conjuntamente por las consejerías de Derechos Sociales y Bienestar, Hacienda e Industria con las empresas, asociaciones del sector y administraciones locales; actualmente se encuentra en exposición pública para recibir aportaciones.

La Estrategia de Comercio. Busca garantizar la supervivencia del comercio de proximidad de Asturias alcanzando un estadio de modernización a través de la Digitalización, que se adapte a las necesidades de competitividad actuales, tanto en contextos globales como locales. En esta línea se plantean acciones de sensibilización, formación  e innovación.

De forma transversal, junto con estas estrategias, la consejería también está trabajando en el documento sobre diversificación económica, que servirá de base para elaborar la estrategia de transición justa (que prestará especial atención a las zonas rurales, la reactivación de las comarcas mineras y áreas específicas como los terrenos contaminados y degradados, así como los vinculados al cierre de las centrales térmicas). Ha desarrollado el programa de fomento de la cultura emprendedora que está a punto de ser presentado. Y por último, pero no menos importante, a través de nuestras contribuciones al Plan Anual de Políticas de Empleo, se pondrán en marcha medidas de apoyo a colectivos con especiales dificultades de empleabilidad, y más específicamente de fomento de la formación, la capacitación profesional y la inserción laboral de las y los jóvenes.

Las diversas estrategias citadas amparan y se nutren de proyectos e iniciativas concretas en su ámbito de acción. La identificación de estos proyectos la hemos realizado a través de contactos directos con organizaciones privadas y públicas, del conocimiento de iniciativas presentadas a las diferentes MDI convocadas por los ministerios, o a través de los grupos de trabajo colaborativos público privados. En relación con estos grupos cabe citar los siguientes:

Desde el Idepa y la Dirección General de Industria se promueve la colaboración en torno a la estrategia de atracción de inversiones, los hubs de innovación (Asturias innovation digital hub, mobility innovation hub, Paradise hub  4 circularity), los clústeres (integrados por 9 entidades clúster), o los programa open innovation y las primas proof of concept que desarrollan proyectos innovadores.

Y también desde la Dirección General de Energía están en marcha dinámicas colaborativas en torno a la Fundación Asturiana de la Energía (Faen), la mesa del hidrógeno o la mesa de la movilidad eléctrica.

Consecuencia de estas iniciativas y trabajos colaborativos, en nuestra consejería, y en un listado sujeto a permanentes modificaciones, a día de hoy tenemos conocimiento de 205 proyectos, agrupados en las siguientes áreas principales.

• Almacenamiento energía: 18 proyectos. Incluye centrales de bombeo o tecnologías de aire criogénico.

• Proyectos de H2: 34 proyectos. Incluye generación de H2 con eólica offshore, fotovoltaica o energía geotérmica, H2 para el transporte o desarrollo tecnológico de electrolizadores.

• Economía circular: 45 proyectos. Valorización de gases siderúrgicos, nuevos materiales, subproductos o gestión de residuos y residuos industriales.

• Energías renovables: 24 proyectos. Biomasa, investigación eólica offshore, fotovoltaica, mini hidráulica.

• Eficiencia energética: 10 proyectos. Incluye sostenibilidad  industrial, rehabilitación energética edificios, impulso a la bomba de calor.

• Movilidad sostenible: 10 proyectos. Vehículos eléctricos competición, corredores de transporte sostenible (eléctrico, H2, GNL/GNC), flotas transporte, transporte público.

• Sector minero: 6 proyectos. Valorización y gestión de residuos, optimización de recursos, digitalización, energías renovables.

• Competitividad industrial: 23 proyectos. Nuevos productos y diversificación industrial, nuevas tecnologías, eficiencia y sostenibilidad, incremento de la capacidad productiva (nuevos centros de producción o ampliación de existentes).

• Descarbonización de la industria: 5 proyectos.

• Baterías para almacenamiento energético: 1 proyecto. 

• Industria de la automoción verde y conectada: 7 proyectos.

• Sector aeroespacial: 1 proyecto. 

• I+D+i para la competitividad empresarial: 8 proyectos. Inversiones innovadoras en cadenas de valor.

• Digitalización industrial: 7 proyectos. Digitalización de centros productivos y de pymes.

• Otros: 6 proyectos. Conectividad, redes inteligentes, redes de calor.

Por último, en relación con la financiación de los proyectos con cargo a los fondos europeos, cabe recordar que esos fondos se canalizan a través de los Presupuestos Generales del Estado.  El Gobierno de la Nación, a finales del mes pasado, envió a Bruselas la versión definitiva del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, para el horizonte 2021-2023 (o Plan España Puede) que, como saben, plantea 4 objetivos principales, 10 palancas, 30 componentes, 102 reformas y 112 inversiones.

Desde nuestra consejería planteamos que las iniciativas a desarrollar en Asturias recibirán financiación de la asignada a las palancas 1, 2, 3, 4, 5, 7 y 8. Y en los componentes 1, 6, 7, 8, 9, 10, 12, 13, 15, 19, 20 y 23. En cualquier caso, serán las conferencias sectoriales convocadas por los respectivos ministerios las que nos confirmarán este extremo y si dicha financiación será territorializada o gestionada de forma centralizada por el Gobierno de España.

A modo de conclusión, señorías, estamos preparados, animados por la mayor ambición y dispuestos a liderar. Pero ni queremos ni podremos hacerlo solos. Vamos a contar con la sociedad asturiana y, de forma muy especial, con la iniciativa empresarial, porque la colaboración público privada será angular en este desafío. También con la Universidad, los sindicatos, los centros tecnológicos; cómo no, con este parlamento, con ustedes. Esto ya se ha dicho ayer, pero me permito repetirlo: Señorías, tenemos que convertir la gestión de los fondos europeos en un éxito colectivo de Asturias.