Equipar tú casa con los electrodomésticos más indispensables es una tarea difícil, sobre todo ante preguntas como, ¿Lavadora normal o lavadora secadora? No siempre la respuesta estará a simple vista cuando hay que evaluar factores que siempre nos faciliten las tareas domésticas.

Una persona tradicional puede preferir confiar en una lavadora normal, pero tiempos modernos señalan a una lavadora secadora como la mejor elección. ¡No dejes a tu tendedero extensible esperando por secar tu ropa! Y sigue los mejores consejos para responder a tus dudas.

¿Invertir en una lavadora normal o lavadora secadora?

Decidir en adquirir una lavadora normal o lavadora secadora es un tema que va muy ligado a la inversión económica. Es decir, el gasto que se puede realizar entre un equipo u otro siempre puede determinar la decisión final del comprador.

Este punto siempre dependerá de los modelos tecnológicos del electrodoméstico que esté considerando comprar. Si bien los más costosos aseguran ser los mejores, a veces gastar más no siempre implica la mejor opción.

Si bien comprar una lavadora normal y una secadora por separado puede resultar costoso, hay lavadoras secadoras cuyos precios pueden ser excesivos. Por ello la inversión económica entre una lavadora normal o una lavadora secadora es algo a considerar relevante.

Además de lo anterior, cabe resaltar que, al largo plazo, un daño en una lavadora secadora compromete todo el proceso de lavado. Mientras que al poseer una lavadora y secadora por separado, ante posibles daños entre un equipo u otro, lavar no sería tedioso.

Ahora bien, el tema de consumo eléctrico también juega un rol no menospreciable al momento de decirnos por electrodomésticos. A la larga, una lavadora secadora eficiente siempre reducirá el consumo de electricidad total que el de ambos electrodomésticos por separados.

Comparación entre una lavadora normal y lavadora secadora

Establecer las diferencias para decidirse entre una lavadora normal o lavadora secadora son claves para tomar una decisión final satisfactoria. Para ello es importante preguntarnos, ¿cuáles son las ventajas y desventajas de una lavadora secadora?

Con la pregunta anterior estableceremos diversos puntos de comparación entre las ventajas y desventajas entra amabas lavadoras:

Ventajas de una lavadora secadora sobre una lavadora normal

Al hablar de adquirir una lavadora secadora, esta debe compensar todas las funcionalidades básicas que puede ofrecer una lavadora normal. Su tamaño es clave para saber cuánto espacio ocupará, pero sobre todo, evaluar el coste económico final entre ambas.

Entre una lavadora normal o lavadora secadora, la principal ventaja es que con la segunda, estaremos equipándonos con dos electrodomésticos por uno. En términos de espacio es clave, porque al ser pequeña nuestra habitación de lavandería, lo más recomendable es una lavadora secadora.

Una lavadora secadora libra de los tendederos, tender tu ropa en la calle, o de no poder secar tu ropa en invierno. Todo gracias a que con su segunda función la ropa solo estará lista para ser planchada o doblada.

No habrá que trasladar la ropa de una lavadora a la secadora porque todo el proceso se realiza en el mismo electrodoméstico.

Desventajas de una lavadora secadora sobre una lavadora normal

Para lavadora normal o lavadora secadora las desventajas son precisas, pero muy a tomar en cuenta.

Inicialmente, una lavadora normal comúnmente tendrá mayor capacidad de carga de ropa entre lavados a comparación de una lavadora secadora. Esto puede traducirse en más o menos tiempo de lavado.

Una lavadora secadora es más propensa a averiarse y causar muchos dolores de cabeza. Además, muchos modelos de lavadoras secadoras suelen ser costosos.

Es más fácil optimizar el consumo de agua y electricidad en lavadoras normales.