La viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, ha presentado hoy a los ayuntamientos las principales líneas del Plan Director de Saneamiento y Depuración del Principado (2020-2030), que dotará de servicio de depuración de aguas a la práctica totalidad del territorio asturiano.
En un acto telemático organizado por la Federación Asturiana de Concejos, Roqueñí ha explicado que el Gobierno de Asturias pretende, mediante este instrumento de planificación, ampliar, mejorar o construir sistemas de depuración en todas las aglomeraciones urbanas y en las agrupaciones rurales formadas por uno o varios núcleos susceptibles de soluciones de depuración colectivas. “Su finalidad es el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible marcados por la ONU en la Agenda 2030, e incluirá los requisitos de la Directiva Marco de Agua y los principios de la economía circular”, ha agregado.
Además de informar sobre el documento, la viceconsejera ha explicado los diferentes pasos de la tramitación, entre los que se encuentra la participación pública, abierta hasta el 22 de febrero; la redacción definitiva del texto y el trámite de evaluación ambiental estratégica. El Principado pretende aprobar definitivamente el plan antes de final de año.
Uno de los trabajos fundamentales en la elaboración del proyecto es el inventario, que permite conocer con exactitud el estado actual de los sistemas de depuración y saneamiento. “En el diagnóstico realizado hemos detectado las principales necesidades y carencias, pero es imprescindible la participación de los ayuntamientos para que, entre todos, logremos elaborar el mejor plan posible, que nos permita contar en 2030 con el mayor porcentaje del territorio asturiano con las aguas depuradas”, ha añadido Roqueñí.
Fijar población
Durante la jornada, se ha destacado la importancia de la prestación de los servicios de saneamiento y depuración para fijar población y atender el problema del reto demográfico. También se ha resaltado la urgencia de hacer frente a los desafíos que plantea el cambio climático, con medidas asociadas a la eficiencia energética y el uso de energías renovables en este campo. Asimismo, se ha subrayado la necesidad de prestar atención a la presencia de contaminantes emergentes y otras sustancias que pueden producir efectos negativos en el medio ambiente o la salud.
La viceconsejera ha trasladado a los responsables municipales las posibles vías de financiación del plan, que en buena medida pasan por los fondos comunitarios, tanto de resiliencia como del mecanismo de recuperación 2021-2026. En cuanto al nuevo marco financiero plurianual 2021-2027, se considera improbable que el nuevo presupuesto que apruebe la Unión Europea siga financiando actuaciones de saneamiento. No obstante, Roqueñí ha subrayado la buena trayectoria del Principado en la gestión de los fondos del programa operativo Feder destinados a saneamiento y depuración: “Sitúan a nuestra comunidad en una posición inmejorable para acceder a financiación europea en el marco del Pacto Verde, cuyos objetivos están relacionados con los retos del ciclo del agua derivados del cambio climático, la economía circular y la digitalización de la gestión”.
“El plan prestará especial atención a la sostenibilidad económica de las inversiones planteadas y aplicará los principios de recuperación de costes y de que quien contamina paga, con una arquitectura basada en la gobernanza y en la participación de todos los agentes involucrados”, ha agregado la viceconsejera.