28 de enero de 2021. Otea, hostelería y turismo en Asturias, ha hecho llegar al Gobierno del Principado de Asturias, a los partidos políticos y al FADE, su propuesta de mejora del Plan de Ayudas del Gobierno del Principado de Asturias cuyo primer borrador fue presentado por los responsables de Turismo asturiano el pasado viernes.
De partida queremos manifestar que las cantidades dispuestas por el Principado en este plan de ayudan resultan insuficientes y evidentemente no compensan las pérdidas que los cierres generan. Baste decir que, en conjunto, las compensaciones del mes de diciembre supusieron una cantidad media por empresa de 2.000 euros,
En este sentido desde Otea seguimos reivindicando un Plan de Rescate integral para el Sector que, además de unas aportaciones directas en sintonía con el nivel económico de la actividad de las empresas, recoja también otras muchas cuestiones.
En todo caso, y teniendo la referencia del borrador del Principado, desde Otea hacemos una propuesta que persigue que las ayudas se dirijan con mayor intensidad a aquellos que más han sufrido los cierres y las restricciones por motivos del Covid-19. La propuesta se sustenta en un estudio realizado por Otea entre las empresas del sector que cuantifica la disminución de ingresos considerando su situación geográfica, su actividad consolidada y su tamaño.
Podemos resumir la propuesta en 4 puntos fundamentales:
1.- Incluir a la Hostelería en el Bloque 1 que recoge las “actividades cerradas y equiparables”, que se recoge en el primer borrador del Gobierno del Principado. En las últimas resoluciones de la Consejería de Sanidad, declarando la alerta sanitaria 4+, se adopta la suspensión de la apertura de los establecimientos de hostelería y restauración y solo permite como alternativa el servicio en terraza´la recogida en el local y el servicio a domicilio. Un porcentaje muy alto de los establecimientos hosteleros no realizan estas actividades y no tienen terraza y, los pocos que disponen de la misma, tienen un uso muy limitado de la misma por las restricciones propias del Covid (distancia de 2 metros entre sillas) y por las características meteorológicas invernales propias de la región. Por todo ello, en la práctica, un porcentaje muy alto de los negocios se ve abocado al cierre forzoso. Las perspectivas, por otra parte, no son especialmente optimistas.
2.- Aumentar en un 20% de media la partida económica destinada a los bloques 1 y 2 (Bloque 1: actividades cerradas y equiparables. Bloque 2: actividades con limitaciones severas) pues son los integrantes de estos grupos los que han sido los más perjudicados por las restricciones impuestas. Como se comentó esta propuesta se sustenta en un estudio exhaustivo de la afección de las restricciones al sector y las perspectivas futuras.
3.- Incluir a los autónomos societarios dentro de la baremación de las ayudas, computando como un trabajador al igual que se admitió a propuesta de Otea para los autónomos colaboradores. La naturaleza del sector de la hostelería hace que tanto los autónomos societarios como los autónomos colaboradores formen parte activa de las plantillas de los establecimientos desarrollando las mismas funciones que los trabajadores por cuenta ajena y por tanto deberían sr así considerados para las ayudas.
4.- Repartir las ayudas en función del número de establecimientos o centros de trabajo y no en función del número de empresas. A cada uno de los establecimientos o centros de trabajo le corresponderá la compensación propia de una empresa, de tal forma que no se perjudique a una sociedad por tener varios centros de trabajo bajo una misma razón social