Barcelona, 29 de diciembre de 2020. El escenario traído por el coronavirus está modificando, entre otras muchas cuestiones, cuánto y por qué se accede a Internet, así como quién lo hace. Incluso hasta afectar a los grupos de población menos digitalizados. Así lo confirma que más del 60% de las personas que superan los 65 años utiliza Internet con mayor frecuencia ahora que con anterioridad a la irrupción de la COVID-19. En concreto, el porcentaje alcanza el 62,2% sumando a los que aseguran recurrir en la actualidad 'algo más' (36%), 'bastante más' (19,2%) o 'mucho más' (7%) a la Red.
La importancia de la Red como herramienta para hacer frente a las diversas y profundas consecuencias de la COVID-19 está fuera de toda duda. 8 de cada 10 de ellos se muestran convencidos de que Internet resulta imprescindible en los actuales tiempos de pandemia. Específicamente, tomando como referencia una valoración de 0 a 10 -siendo el máximo 'totalmente imprescindible'-, el 81,8% se posiciona entre el 6 y ese tope.
Esa afirmación se traslada a la realidad de una forma coherente y consecuente. De esta manera, aunque el 96% de los encuestados ya contaba con conexión a Internet antes de la llegada del coronavirus, el 43% de los mayores de 65 años que contrataron los servicios de algún operador en el último año admite que el motivo de hacerlo fue precisamente la pandemia.
Como es previsible, el tiempo de uso de Internet continúa al alza también en este sector de la población: más del 64% de los mayores de 65 años se conecta en la era del coronavirus entre 1 y 4 horas al día. Mientras el 18% rebasa las 4 horas por jornada y el 5% permanece on line un tiempo superior a las 8 horas. Con todo, las personas en edad de jubilación que se conectan a Internet al menos 60 minutos al día son casi el 90% del total.