Jueves, 29 de octubre. Las ventajas de las compras online, como poder comprar desde cualquier lugar, comparar precios o recibirlo en casa, se han hecho más importantes en un periodo como el actual, en el que las limitaciones a la movilidad dificultan la compra física. El ecommerce crece en España año a año, y eventos como el Black Friday contribuyen significativamente a ello. Las rebajas son un reclamo para los compradores. La compra online ofrece además otras posibilidades. Al ahorro que suponen los descuentos se suma la posibilidad de ganar dinero comprando a través de plataformas de Cashback.

¿Qué es exactamente el Cashback?

Se puede traducir Cashback como devolución de dinero. Los usuarios reciben pagos por las compras que hacen. Un sistema que en España tiene poca implantación, y generalmente asociado a tarjetas de crédito, pero muy desarrollado en países como Reino Unido, Alemania, Estados Unidos o Francia. El principio es muy simple: los consumidores realizan compras en sus ecommerce de .referencia a través del portal de cashback. El vendedor paga una comisión por la venta que se reparte en la comunidad de usuarios. La media anual que un usuario recibe es de en torno a los 120 euros.

¿Cómo funciona?

Para que un usuario pueda recibir dinero por sus compras es necesario crear una cuenta en la plataforma. Con ella se podrán realizar las compras, recibir la devolución y obtener el dinero. Ya sea a través de web, app o extension del navegador

Una vez se ha acumulado una cantidad determinada, el reembolso se realizará a través de transferencia bancaria, Paypal u obtener una tarjeta regalo.

¿Cuáles son los beneficios?

El sistema de Cashback es muy beneficioso tanto para vendedores como para compradores. Estos últimos ganan dinero, además de que puede ser compatible con otras ofertas y descuentos. Por otro lado, las plataformas de Cashback suelen ofrecer descuentos especiales y exclusivos para sus miembros. Los vendedores se benefician a través de la generación de ventas, que no conseguirían con sus medios convencionales.

En países como Alemania, Reino Unido o Francia, el cashback tiene una gran implantación, no así, todavía, en España.