La MERP, Mesa por el Blindaje de las Pensiones, rechaza las presiones de Europa y llama a blindar las pensiones en la Constitución
Comunicado
Recientemente hemos conocido que la Comisión Europea ha endurecido los criterios y condiciones para que lleguen a España los 77.000 millones de ayudas no reembolsables, que forman parte de los 140.000 millones del fondo de recuperación Next Generation EU. Si hasta ahora la única condición a la que estaban sometidos los fondos era gastarlos adecuadamente para paliar los efectos de la pandemia y de las dificultades socioeconómicas derivadas de ella, ahora el Ejecutivo comunitario exigirá a los países que se cumpla «el paquete completo de recomendaciones específicas dirigidas a ellos por el Consejo» como condición para el desembolso de los fondos.
Entre las reformas que la Comisión lleva tiempo exigiendo a España está una reforma del Sistema Público de Pensiones, que incluya «ajustes» que «moderen» el gasto en esta partida. Cabe recordar que en los últimos años, Bruselas ha cuestionado decisiones del actual Gobierno, como que las pensiones se hayan vuelto a vincular con el IPC, o que se haya aparcado la aplicación del factor de sostenibilidad que las vincula con la esperanza de vida y otros factores macroeconómicos, y que también suponía una merma del poder adquisitivo de los pensionistas presentes y futuros.
Y cabe recordar también que, en el terreno de las pensiones, las exigencias de algunos países en las negociaciones previas a la Cumbre Europea de julio, en las que se decidieron los fondos de reconstrucción, siempre fueran en el mismo sentido: favorecer la privatización total o parcial del Sistema Público de Pensiones.
Por todo ello, la Mesa Estatal por el Blindaje de las Pensiones consideramos que es preocupante que la Comisión Europea utilice el argumento de la supuesta “insostenibilidad” de nuestras pensiones para condicionar las ayudas. La sostenibilidad de las pensiones solo depende de la voluntad política, tal y como hemos podido comprobar, especialmente, en los años de crisis.
Si las pensiones fueron el colchón de muchas familias en la crisis de 2008, y lo van a ser en la crisis provocada por la pandemia; si los pensionistas son el sector más vulnerable y lo son especialmente ante el coronavirus; la reforma de las pensiones más urgente es la que las blinde en la Constitución. Para la MERP, las presiones inaceptables de la Comisión Europea, sobre nuestro Sistema Público de Pensiones, ponen de manifiesto la necesidad de prohibir de forma explícita en la Constitución la privatización de las pensiones y la pérdida de poder adquisitivo.
El futuro de nuestras pensiones, que es el de todo el país, no puede depender de tormentas económicas, sea cual sea la razón que las provoque, del color del Gobierno, o de las decisiones de instituciones internacionales.
Blindemos las Pensiones en la Constitución. Ni recortes. Ni Privatización.