Desde el comienzo de la crisis han desaparecido más de 400.000 pymes y autónomos.
CEPYME pide a los partidos políticos que se comprometan a acabar con la morosidad de las Administraciones Públicas.
El Presidente de CEPYME, Jesús Terciado, ha presentado hoy el documento Legislatura Pyme, aprobado por el Comité Ejecutivo de la Confederación, en el que se recogen las principales propuestas para superar la crisis formuladas por CEPYME a los partidos políticos de cara a las próximas Elecciones Generales.
El documento destaca que las pymes y los empresarios autónomos, que en el pasado fueron el motor de generación de riqueza y empleo, han sido quienes más han sufrido la crisis. El tejido empresarial español, conformado casi exclusivamente por pymes y autónomos (99'9 por ciento) se ha reducido sensiblemente en los cuatro años que llevamos de crisis, tanto en número de empresas como en el tamaño de las mismas, es decir, el empleo que sustentan.
Desde el comienzo de la crisis en 2007, han desaparecido más de 180.000 empresas, lo que refleja una caída del 12'5 por ciento, y más de dos millones de empleos, superando la tasa de paro el 21 por ciento. Paralelamente, el censo de trabajadores y empresarios autónomos se ha reducido en casi 300.000 unidades, un 9 por ciento del total.
El desplome de la demanda, la falta casi absoluta de financiación, las dificultades de acceso a los mercados exteriores, la creciente morosidad de las administraciones públicas y los problemas para investigar e innovar están en el origen de los males que aquejan especialmente a las pymes, aunque sean comunes a todo tipo de empresas y que se unen a otras circunstancias también comunes a todo el tejido empresarial como son los problemas de un mercado laboral excesivamente rígido y poco acorde con las circunstancias actuales; una burocracia excesiva que se refleja en innumerables trabas y obstáculos para la creación y desarrollo de iniciativas empresariales o la elevada fiscalidad que grava a las empresas.
La imagen del emprendedor
En este contexto, CEPYME considera fundamental potenciar la imagen del emprendedor y su función social como creador de riqueza y empleo para toda la sociedad. La Confederación plantea que la próxima sea la Legislatura de la Pyme y de los empresarios autónomos, lo que implicaría orientar todas las iniciativas a generar un entorno favorable para la actividad productiva, la creación de empresas y la consolidación de las mismas.
La creación de un clima propicio para el fomento del espíritu emprendedor comprende priorizar en los programas educativos y de formación los conocimientos y capacidades que requiere el desarrollo de proyectos empresariales y crear un entorno favorable para el la creación y consolidación de iniciativas empresariales.
Este entorno favorable debe contemplar las necesidades de los emprendedores en todas sus etapas y, entre otras, medidas, es necesario eliminar las barreras administrativas y la complejidad de las normas que obstaculizan la creación y la consolidación de las empresas y eliminar las dificultades para obtener recursos financieros, que actualmente representan una barrera importante para el inicio y el desarrollo posterior de las empresas.
En esta línea, CEPYME pide a los partidos políticos que se presentan a las elecciones que se comprometan a acabar con la morosidad de las administraciones públicas y a establecer instrumentos administrativos y jurisdiccionales eficaces para garantizar el cumplimiento de la ley.
Asimismo, reclama medidas para mejorar la financiación de las pymes y el compromiso expreso de llevarlas a cabo de manera urgente. Para ello, la Confederación considera urgente culminar el proceso de reforma del sistema financiero.
En materia financiera CEPYME propone también ampliar el importe máximo de concesión de créditos por parte del ICO Directo y abrir nuevas vías para que el cuantioso volumen de recursos del ICO llegue a las empresas, mejorando la eficiencia en la gestión de intermediación de estas líneas. También se propone mejorar la estructura del sistema de garantías para las pymes y diversificar las tradicionales fuentes de financiación.
En cuanto al mercado laboral, CEPYME cree que la gravedad de la crisis ha puesto aún más de manifiesto la necesidad de acometer reformas estructurales profundas en nuestro mercado de trabajo para conseguir una mayor flexibilidad y adaptabilidad a las empresas. Para ello, pide eliminar rigideces a la contratación estable y abordar una mayor flexibilidad interna en las pymes, así como revisar el factor impositivo que penaliza el empleo, en particular las cotizaciones sociales.
CEPYME reitera la necesidad de avanzar en la reducción del déficit estructural y del endeudamiento público y propone reestructurar y reorientar el gasto público, limitando los gastos corrientes y optimizando las asignaciones correspondientes a la inversión.
Igualmente, CEPYME pide mejorar y agilizar los procedimientos administrativos asociados a la fiscalidad de los empresarios autónomos, especialmente el IVA y establecer la posibilidad de suspender el ingreso de este impuesto hasta que no se produzca y correspondiente ingreso por la venta de bienes o prestación de servicios.
El documento de propuestas presentado por CEPYME contiene también medidas en otros ámbitos, como la formación o la internacionalización.