El Grupo Socialista reitera su propuesta de unas fiestas abiertas y que la ciudadanía no tenga que pagar dos vecesEl concejal socialista Diego Valiño cargó hoy contra “la visión mercantilista” de la responsable de Festejos Covadonga Díaz que vinculó la celebración de los conciertos de San Mateo a su rentabilidad económica.

“Es realmente inaudito que el bipartito condicione las fiestas de San Mateo a que no suponga un coste económico. Jamás unas fiestas de San Mateo se han hecho con afán de recaudar o de obtener dinero para las arcas municipales. Creo que el afán del PP y Ciudadanos por equiparar al Ayuntamiento con un consejo de administración está alcanzando cotas insoportables”, denunció Valiño.El edil del PSOE recordó a la concejala de Festejos que su obligación sería promover unas fiestas abiertas que permitan el acceso de la ciudadanía a la programación a pesar de la situación de crisis que atravesamos.

El Grupo Municipal Socialista ha propuesto un San Mateo con eventos de menor tamaño que eviten aglomeraciones, actuaciones en los barrios y una programación que el la ciudadanía ovetense no tenga que pagar dos veces. “Las fiestas se hacen con dinero público y la única rentabilidad que han de tener es social, una perspectiva que desde luego a la concejala Díaz se le escapa”, apuntó Valiño.Para los y las socialistas el criterio economicista en ningún caso puede ser la excusa para celebrar o no las fiestas de San Mateo.

“Que no sea rentable económicamente no es un motivo para que no se haga. El Ayuntamiento no está para hacer negocio y más en plena pandemia. Su obligación es hacer un esfuerzo adicional en lo cultural y lo festivo”, sentenció Valiño. Respecto a la reducción de aforos, el edil socialista remarcó que la salud pública y la garantía de seguridad para la ciudadanía está por delante de cualquier consideración política y debe ser la prioridad absoluta para cualquier cargo público. 

No obstante, Valiño ironizó sobre la preocupación de la concejala de Festejos por la seguridad de los eventos cuando esta misma semana votó a favor de aprobar una actividad que en ese momento estaba prohibida por la dirección general de Salud Pública. “Parece que existen contradicciones muy fuertes entre el discurso y los hechos de la señora Díaz”, apuntó el edil del PSOE.