«Escribí esta historia en el verano de 2014. Terminaba el instituto y comenzaba la etapa universitaria (igual que los personajes) y me sentía feliz, libre, confuso y solitario.»
Sebastián García Mouret (Oviedo, 1996) es un periodista y escritor español, con gran presencia en redes sociales en el ámbito de la divulgación literaria. Creó su canal El coleccionista de Mundos en el verano de 2012 y lleva desde entonces subiendo vídeos, llegando a cientos de miles de personas y sumando millones de visitas. Actualmente sigue entregado al fomento de la lectura entre los más jóvenes, creando contenido en internet, impartiendo conferencias en festivales y ferias del libro, y como redactor en la revista de literatura juvenil El Templo de las Mil Puertas. Nuestro último verano es su primera novela publicada.
¿Cómo nace Nuestro último verano?
Escribí esta historia en el verano de 2014. Terminaba el instituto y comenzaba la etapa universitaria (igual que los personajes) y me sentía feliz, libre, confuso y solitario. Quise escribir una historia coral, que hablase de madurar desde muchas perspectivas y mostrase cómo la sociedad nos presionaba tanto en el ámbito académico como financiero. Todo ello lo mezclé con los entresijos de la amistad (y la incertidumbre de lo que pasa cuando cada persona toma un camino diferente), un romance de verano y una complicada relación con unos padres. Et voilá ! «Nuestro último verano». Evidentemente, esta primera versión tuvo muchos retoques cuando, cinco años más tarde, decidí que quería publicarla. De estilo, sobre todo (mi prosa había cambiado una barbaridad). Pero me esforcé porque mantuviese su esencia melodramática y adolescente, para no reescribir la historia desde una mirada condescendiente. Ahora me veo desde el futuro y pienso “chico, no era para tanto”, pero de aquella todo era trágico y legendario, y así debía quedarse.
¿De qué manera te ha influido tu labor como crítico literario o booktuber a la hora de escribir la novela?, ¿has sido muy duro contigo mismo?
Sí, muchísimo. Hay una mirada especialmente crítica sobre las obras de los booktubers cuando deciden publicar. Y lo entiendo. Me parece lógico. Pero, sin duda, me frenó durante mucho tiempo. Rechacé muchas ofertas de publicación en el pasado, antes de lanzarme. No porque no quisiese publicar (era mi sueño), sino porque quería estar orgulloso del manuscrito que lanzase. Por mí, y por esa lupa que sabía que habría encima de mi obra. Ahora la gente podrá criticarlo todo lo que quiera, y yo estaré pendiente de sus críticas para seguir mejorando, pero publico con el convencimiento de que estoy orgulloso de esta novela.