•  Hasta el momento, entre actuaciones ejecutadas, en ejecución y en licitación,  la CHC ha comprometido inversiones por valor de 130 M€
• El Gobierno Regional no puede modificar unilateralmente los anteproyectos de las EDAR de San Claudio y Villapérez, a menos que esté dispuesto a romper el convenio y asumir en solitario la ejecución de los mismos
• La CHC sólo otorgará al Principado la autorización de vertido si cumple los parámetros de calidad establecidos por la normativa ambiental

Madrid-. El Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico ha ejecutado, está ejecutando o ha licitado inversiones que rondan los 130 M€ a las que se comprometió cuando el MARM, la Confederación Hidrográfica (entonces del Norte) y el Gobierno del Principado de Asturias firmaron el Plan Nacional de Calidad de las Aguas 2007-2015 (PNCA).

A pesar de lo complejo que resultó, en términos administrativos y de coordinación entre instituciones, echar a andar el plan, no sólo es que se esté siguiendo el ritmo inversor marcado por el compromiso adquirido, sino que además, el Estado se ha hecho cargo, a pesar de no tener competencias en materia de saneamiento, de las actuaciones más necesarias para Asturias. Entre ellas, en lo que a la Confederación Hidrográfica se refiere, destacan:

-          Colector industrial de la margen derecha de la ría de Avilés. Ejecutado.

-          Edar del Este en Gijón. Actualmente en ejecución.

-          EDAR del Gafo en Casielles y terminación del saneamiento del Nalón. Actualmente en ejecución.

-          Colector Norte de Oviedo. Actualmente en ejecución.

Tan sólo estas cuatro actuaciones, ya suman una inversión de 130 M€ aprox.

En el caso concreto de la ampliación de las depuradoras de San Claudio y Villapérez, será también el MARM, en este caso a través de AcuaNorte, quien aportará a fondo perdido casi el 80 % de la inversión, contando para ello con financiación europea. Además, la Sociedad Estatal ha ofrecido al Principado la posibilidad de endeudarse por la cantidad de 16 M € - partida que debe aportar el ente autonómico  para la ejecución de las obras- , y recuperar esta cantidad con una fórmula económica, que le permitiría a la administración regional abonar la inversión a largo plazo.

Comisión de seguimiento

Además de para registrar una serie de actuaciones y plasmar el modo de ejecución y financiación de las mismas, el convenio asumido por las administraciones en el Plan Nacional de Calidad de las Aguas 2007-2015, establece la figura de la Comisión de Seguimiento. Ésta cuenta con sobrada representación del Gobierno Regional y se reúne al menos una vez al año, desde la firma del protocolo. Las funciones de dicha Comisión pasan, entre otras, por el análisis de los proyectos y la aprobación de los mismos por consenso entre las administraciones implicadas.

Actuación unilateral y falseo de cifras

Ello pone de manifiesto que el Gobierno del Principado, no puede actuar ahora de forma unilateral y alterar los proyectos ya consensuados y aprobados, a menos que esté dispuesto a romper el acuerdo y asumir en solitario la realización de los obras. De mano, porque según las condiciones de financiación y ejecución de los proyectos incluidos en el PNCA, la aprobación y desarrollo de los trabajos relativos a las depuradoras de San Claudio y Villapérez, corresponde a AcuaNorte, pero además, porque dichos anteproyectos ya se aprobaron y consensuaron en su día, con el anterior gobierno regional, tras los pertinentes estudios de análisis de alternativas.

Sin entrar al detalle en el contenido de los anteproyectos, en ellos se pone de manifiesto una repercusión de costes de explotación mucho menor a la que ahora esgrime el Principado, desde cuya viceconsejería de Infraestructuras se han incrementado sensiblemente las cifras de mantenimiento resultantes.

Autorización de vertido

Con su actitud, la administración autonómica, se está situando en un camino sin salida, que, con gran probabilidad, puede llevar a la paralización definitiva de estas piezas claves en el saneamiento del área central de Asturias, con todo lo que ello conlleva, en detrimento de la región.

El viceconsjero de Infraestructuras olvida que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, como no puede ser de otro modo, sólo otorgará la correspondiente autorización de vertido al Principado, toda vez que el vertido cumpla los parámetros de calidad exigibles en cumplimiento de la normativa.

La Confederación Hidrográfica insta al Principado a agilizar la firma de convenio y licitación de las obras de la EDAR de Villapérez, cuya tramitación ya va con retraso, pues – a tenor de la magnitud de la inversión y de la complejidad de los trabajos previstos - debería estar ya licitada: por un lado, en cumplimiento de los plazos estipulados para poder beneficiarse de la aportación europea,  y por otro,  para no incumplir con la autorización de vertido, condicionada a que las obras de ampliación de esta depuradora, deberán estar ejecutadas a 1 de enero de 2015.

Y en el caso de la ampliación de la EDAR de San Claudio, siguiendo la línea marcada para la obtención de Fondos Europeos y para no incumplir con la autorización de vertido otorgada al Principado por la CHC, y condicionada a que las obras estén ejecutadas a 1 de enero de 2014, tanto el convenio como la licitación de los trabajos debería haberse producido antes de fin de 2011.

CHC recuerda al Principado que la decisión unilateral de aparcar los compromisos adquiridos y seguir con los planteamientos y descalificaciones emanadas por el portavoz de la viceconsejería de Infraestructuras resulta temerario e irresponsable, y puede conducir a la definitiva frustración de estas inversiones, con las nefastas consecuencias para el medio ambiente y los desarrollos urbanos e industriales de Oviedo y una parte significativa de la cuenca del Nora.