El oso pardo asoma cautelosamente a Galicia

El oso pardo asoma cautelosamente a Galicia

A pesar de las evidencias de que los osos pardos rondaban por el Parque Natural dos Montes do Invernadeiro, en la provincia de Orense, hasta ahora no se había observado ningún ejemplar. Las cámaras de fototrampeo de la película Montaña ou Morte han logrado las primeras imágenes de un úrsido en esta zona. El animal pudo venir de la Serra do Courel, en Lugo, donde se están realización esfuerzos de conservación. FOTO. Imagen del oso pardo macho grabado en el Macizo Central Ourensán. / Zeitun Films 

 

El oso pardo (Ursus arctos) es una especie protegida en España desde 1973 y en Galicia ha mantenido una presencia histórica. El año pasado, los técnicos de la Fundación Oso Pardo encontraron en el Parque Natural dos Montes do Invernadeiro, en la provincia de Orense, una muestra de un excremento de oso.

“También hubo algún ataque a colmenas muy cerca”, informa a SINC Fernando Ballesteros, miembro de la fundación y coordinador del proyecto LIFE Oso Courel. Pero no avistaron ningún individuo.

Desde hace ya algunos años se recogen datos de la presencia de osos en las sierras de Orense, informan desde la Fundación Oso Pardo

Gracias a las cámaras de fototrampeo instaladas en la zona para la película Montaña ou Morte –producida por Felipe Lage para Zeitun Films y dirigida por el cineasta Pela del Álamo–, se ha podido filmar ahora a un macho de oso pardo de entre tres y cinco años.

“Estas imágenes demuestran claramente que algún ejemplar sigue frecuentando la zona”, subraya Ballesteros, que desconocía la realización de la cinta. “Nos han sorprendido muy gratamente las imágenes, que son preciosas, y reflejan sin ninguna duda la presencia del oso en esa zona”, cuenta a SINC.

El úrsido ha sido captado en diversas localizaciones del parque natural, y según comunica el equipo de la productora –asesorada por los agentes ambientales Ricardo Prieto Rocha y Tomás Pérez Hernández de la Xunta en O Invernadeiro–, podría ser el primero que se observa transitar esta comarca en los últimos 150 años.

No obstante, desde hace ya algunos años se recogen datos de la presencia de osos en las sierras de Orense, no solo ataques a colmenas, también se han detectado algunas huellas, sobre todo en la comarca de Valdeorras y en el entorno de Peña Trevinca, según informan desde la Fundación Oso Pardo.

“El verano pasado un oso llego incluso al Parque Natural de Monteshino en Portugal, donde sí fue el primer avistamiento confirmado en el país en más de 150 años”, señala Ballesteros.

 

 

Recuperación del oso en la cordillera cantábrica

El oso pardo filmado en Orense ahora podría proceder de la zona occidental, de la Serra do Courel (Lugo) –donde se está desarrollando el proyecto LIFE con financiación europea para favorecer la expansión de esta especie a nuevos territorios–, o de núcleos de los Valles Occidentales del Alto Sil (León) y el occidente asturiano que lleguen a la zona por las sierras del occidente leonés.

El avistamiento del nuevo ejemplar tiene que ver con la recuperación de la especie en toda la cordillera cantábrica

El avistamiento del nuevo ejemplar “tiene que ver sin duda con la recuperación de la especie en toda la cordillera cantábrica”, apunta Ballesteros, coordinador de este proyecto.

Para los expertos, tanto Courel como estas zonas de Orense, Sanabria y Carballeda (ambas en Zamora) constituyen una vía de expansión interesante para la población cantábrica de oso pardo, “con una gran importancia para la conservación global de la especie”, continúa Ballesteros, quien considera que este área tiene una buena calidad de hábitat para el oso y, además, no hay a priori una percepción negativa por parte de los habitantes del medio rural.

Sin embargo, desde la Fundación Oso Pardo aseguran que es necesario acompañar la dispersión del oso con medidas de información a la población local y de prevención de los daños que puede producir. “Estos son pocos, básicamente algunos ataques a colmenares, y son fáciles de evitar protegiendo las colmenas con pastores eléctricos”, matiza Ballesteros.

Las imágenes forman parte de la película Montaña ou Morte, que se encuentra en fase de desarrollo, y que cuenta con financiación de la Axencia Galega das Industrias Culturais (AGADIC) y la colaboración del Servicio de Conservación de la Naturaleza de la Xunta de Galicia en Ourense.

 

 

Dejar un comentario

captcha