El Ayuntamiento de Gijón continúa adoptando medidas encaminadas a paliar los efectos económicos que el Estado de Alarma pueda tener en la economía de la ciudad y de las personas.
Por ello hoy ha decidido suspender durante los próximos tres meses, el cobro de las cuotas de todos los préstamos participativos otorgados por Gijón Impulsa, así como no facturar durante el mes de abril los arrendamientos y servicios prestados a todas las empresas instaladas en los edificios empresariales que gestiona esta empresa municipal. Asimismo se ha establecido un sistema de pago semanal, de las facturas recibidas por los proveedores de servicios, suministros y obras.
El Ayuntamiento ha suspendido también el cobro de todos los servicios que no puedan estar siendo prestados, como es el caso de las escuelas infantiles de 0 a 3 años, el comedor escolar o el programa 11x12. A las familias que ya hayan pagado estos servicios por adelantado, se les devolverá el dinero correspondiente a los días de suspensión de los mismos.
Sanciones Policía Local
Un total de 76 personas fueron denunciadas en el día de ayer por incumplir las medidas establecidas en el Estado de Alarma, 58 hombres y 18 mujeres, de diversas edades, 13 de estas personas, mayores de setenta años. También en algunos casos se pudieron ver menores de paseo con su progenitores, y en el día de ayer concretamente, a cuatro menores solos en un banco charlando, a los que se les llevó a casa, y sobre los que se realizaron sendas actas para la Fiscalía de Menores.
Además, se denunciaron dos locales de hostelería, una confitería por la mañana que ya había sido denunciada el pasado sábado, y un bar de la calle Antonio Cachero, en el que se encontraban ocho personas en su interior. Evidentemente, se procedió a la denuncia tanto del local como de las personas en el interior, pero además, entre los clientes se encontraban algunos consumiendo estupefacientes y tabaco, motivo por el que también fueron denunciados. Al gerente del local, se le tramitan expedientes por tolerar el consumo tanto de tabaco como de estupefacientes, además de por otras deficiencias del local, como carecer de la cartelería reglamentada, no presentar licencia, o tener los extintores caducados.