(De realoviedo).-Dice el técnico oviedista que en Lugo espera a un Real Oviedo "que meta compromiso, fervor y tensión" ante más de mil aficionados azules que arroparán a su equipo
El entrenador del primer equipo José Ángel Ziganda valoraba esta mañana en sala de prensa el estado del equipo en la previa de la visita al CD Lugo este domingo en el Anxo Carro. Preguntado por cómo ha sido la adaptación, comentaba el preparador navarro que "ha sido muy poco tiempo, todo con mucha prisa. Estamos ocupados en las tareas importantes, midiendo los pasos que damos. No venimos a hacer una revolución, no es el momento. Estamos marcando las pautas, pensamos que sería un error muy grande cambiar todo". En cuanto a la plantilla dice Ziganda que "los jugadores están bien. No son buenos para nadie los cambios, pero son expertos y saben que el fútbol funciona así. Los chicos están concienciados del partido del domingo, les veo predispuestos" y también cree que "todos están preparados" ante los posibles cambios que pueda introducir en el once". Unas modificaciones a introducir o no en el equipo en las que tendrá en cuenta bastantes variables: "depende de los estados de forma, lo anímico. No me cierro a ningún sistema. El dibujo cambia en función de las circustacias del partido. Intentaremos poner a los futbolistas que estén mejor el domingo".
En las tres sesiones de entrenamiento que ha tenido con los jugadores, el mensaje ha sido claro. "Yo digo lo que pienso. Son catorce partidos y queda mucho. La situación no es buena, pero hay tiempo de sobra para salir de donde estamos. Tenemos que centrarnos en lo que buscamos, estamos trabajando en dos tres pautas para estar más compactos". Y de su equipo el domingo en Lugo espera "un Real Oviedo que compita. Va a haber más de mil aficionados de azul, por lo que tenemos que meterle compromiso, fervor y tensión. La situación requiere soltarse y dar la mejor versión de cada uno. Es una suerte que se desplace tanta gente". Del rival habla también Ziganda dice que "nos creemos que somos el centro de todo, pero no es así. Ellos están centrados en lo suyo, juegan en casa y saldrán con la moral alta. Es un rival directo. No es una final, final es o todo o nada. El domingo no se acaba nada. Si ganamos hay que seguir y si no tampoco se acaba. El domingo hay que dar la versión que tenemos cada uno". Finalmente, y sobre su adaptación estas primeras horas a la ciudad y al club, dice el técnico que "lo poco que llevo no me ha sorprendido. Todos los mensajes que he recibido son de felicitación y todo el mundo habla bien de la ciudad y de su gente. Todo es parabienes, una bienvenida que se agradece", sentenciaba.
