La iniciativa pretende agilizar la gestión de la prestación, ampliar las oportunidades laborales y agilizar la recuperación de la misma cuando se accede a programas de empleo
Asturias.-Izquierda Unida logró hoy sacar adelante su propuesta para mejorar la eficacia y la eficiencia en la gestión del Salario Social, mediante una coordinación entre los servicios sociales y los de empleo, al tiempo que con medidas que aseguren la recuperación de esta prestación en los casos que, tras un período de empleo, los perceptores no hayan logrado una suficiente cotización para acceder a un subsidio contributivo. La iniciativa, defendida por el diputado Ovidio Zapico, contó con el apoyo de PSOE, PP, Podemos y Foro, mientras que Ciudadanos se abstuvo y la ultraderecha, como se esperaba, votó en contra.
Ovidio Zapico recordó el hito que había supuesto el Salario Social en el contexto asturiano, gracias a la presencia de Izquierda Unida en un Gobierno que sacó adelante una ley que ha demostrado su eficacia en la lucha contra la pobreza y la desigualdad. De hecho, según los últimos datos de entidades como Cáritas o la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión, EAPN-Asturias, el Principado está 6 puntos por debajo de la media española en índices de pobreza y esto es debido, según reconocen los expertos, al uso del Salario Social como una herramienta clave en las políticas contra la exclusión.
Zapico pidió compromiso para garantizar que el Salario Social se mantenga en el futuro blindado como derecho subjetivo y, además, reclamó que se inste a la Administración Central para que se apruebe una prestación similar para todo el país, con recursos económicos del Estado, aunque gestionada a través de las Comunidades Autónomas. El objetivo, señaló el diputado, debe ser atender las necesidades vitales básicas de las personas y familias en situación de vulnerabilidad.
El debate de la iniciativa de IU puso de manifiesto las diferencias en la cámara con las voces que, desde la derecha, se alzaron en el sentido de estigmatizar a los beneficiarios del Salario Social al señalar que, en demasiadas ocasiones, algunas de estas prestaciones estaban basadas en la picaresca. Este posicionamiento reiterado de la derecha y la patronal asturiana fue rebatido y criticado por Ovidio Zapico quien lamentó que, de forma continuada, desde los sectores más conservadores se bombardee con “campañas, mentiras y tergiversaciones” sobre lo que calificó de herramienta imprescindible para la inclusión social. Y es que, frente a las críticas por supuestos fraudes, los datos demuestran que la prestación cumple su objetivo. De hecho, un 60% de las personas perceptoras lo hacen como un complemento a pensiones no contributivas, y más del 20 por ciento se corresponden con familias monoparentales femeninas con varios hijos a cargo que, precisamente por las necesidades de crianza se ven en demasiadas ocasiones limitadas, cuando no impedidas, a trabajar.
Dentro de las alternativas de mejora de la situación de las personas beneficiarias del Salario Social, Ovidio Zapico citó las que se liguen al empleo verde social, como la erradicación de la cortaderia selloana (plumero de la pampa) o de la vespa velutina (avispa asiática). Eso sí, los empleos ligados a esos programas tienen que ser remunerados con retribuciones superiores al SMI.