Más de 30.000 personas han huido de Libia hacia Túnez en las últimas tres semanas, indicó hoy la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
La mayoría de los civiles pertenece a la etnia berebere y abandonaron sus hogares ubicados en la región montañosa del oeste del país por temor a los constantes bombardeos, señaló el portavoz del ACNUR, Andrej Mahecic.
“Según lo que describen las últimas personas que arribaron, las localidades de Nalut y Wazin en esa región montañosa están prácticamente desiertas.
Solamente se ven unos pocos hombres y ninguna mujer o niños”, dijo el portavoz.
Agregó que menos del 10% de los que han llegado a Túnez permanecen en campamentos, la mayoría de los refugiados son acogidos con gran generosidad por las comunidades tunecinas.