El candidato de IU de Asturias al Congreso responde en el rastro de Gijón, durante más de una hora, a las inquietudes de los asturianos
Gaspar Llamazares, candidato de IU de Asturias al Congreso, respondió durante más de una hora, a la entrada del rastro en Gijón, a las preguntas de jóvenes y ciudadanos que acudían al mercado semanal. En la calle, micrófono en mano, Llamazares arrancó su intervención invitando al resto de candidatos a presentar propuestas “serias” en una situación “dramática”, sobre todo para los jóvenes que padecen un nivel de paro de más del 50% y los que lo tiene es temporal y “ni siquiera llegan a mileuristas”.”El desempleo es el verdadero debate que tenemos que realizar en esta campaña”, aseguró el candidato de IU antes de someterse a una amplia batería de preguntas, la mayoría de ellas centradas en el empleo y la situación económica.
Entre las primeras preguntas uno de los jóvenes demandaba, “sin demagogias”, políticas concretas para los jóvenes y para crear empleo ya que todos los partidos aseguran que su principal objetivo es éste. Llamazares invitó al interpelante a repasar lo que han hecho los partidos mayoritarios cuando gobiernan: el PSOE rebaja pensiones y sueldos a funcionarios y alarga la edad de jubilación, el PP en Madrid recorta en educación y deja a miles de interinos sin empleo, Foro Asturias, en nuestra comunidad autónoma, recorta inversiones en infraestructuras y en la RTPA. Frente a ello, IU apuesta por la inversión pública para mantener y generar empleo, sin recortes en educación, sanidad o bienestar. Del mismo modo, abogó por recuperar políticas de formación y empleo y recordó que los jóvenes sin formación son los que más sufren el desempleo en estos momentos.
“¿De dónde saldrá el dinero para abordar ese plan para reactivar la economía y recuperar el empleo?”, fue otra de las cuestiones planteadas por el público presente. De terminar con el fraude fiscal y de realizar una reforma fiscal para que paguen más los que más tienen, explicó el candidato. “En estos momentos el 80% de la recaudación de impuestos es de asalariados y consumidores, mientras que el 3% de la población más rica, prácticamente elude el pago de impuestos o lo hace en una cuantía mínima”, respondió. “¿Si se aumenta la presión fiscal no se corre el riesgo de que las empresas se vayan a otros países?”, preguntaba una chica entre los presentes. “No os preocupéis, tienen tantos beneficios que les va a seguir interesando tener empresas en España”, sostenía el candidato.
Entre las dudas, algunas de ellas casi denuncias, figuró también la situación de falsos autónomos a la que se ven abocados muchos jóvenes si quieren trabajar, cuando en realidad desarrollan un trabajo asalariado a las órdenes de una empresa empleadora; también cuestiones sobre los paraísos fiscales o sobre las palabras del presidente de la CEOE sobre los programas económicos de PP, PSOE, CIU o PNV, sobre la indignación creciente en la sociedad contra los políticos o cómo ese malestar puede trasladarse a las urnas, a través de la abstención o el voto en blanco, cuestiones ambas que el candidato explicó que favorecen a los partidos mayoritarios que se olvidan de ese porcentaje de votos-protesta al día siguiente de las elecciones. En el tiempo que duraron las preguntas, algo más de una hora, no faltaron las preguntas sobre el tratamiento a las víctimas de ETA o sobre cuándo los países “van a hacer frente al terrorismo financiero y Merkel y Sarkozy dejen de ser marionetas de los grandes bancos”