FOTO: Muchas tierras indígenas han sido quemadas por ganaderos y madereros durante años, pero los incendios de 2019 están siendo especialmente devastadores. En la imagen Hemokomaá, un hombre awá, muestra su selva tras ser devorada por las llamas en 2010. © Fiona Watson/Survival
Líderes indígenas de la región amazónica de Brasil califican los devastadores incendios como una “plaga” aterradora.
Antonio Enésio Tenharin, del pueblo indígena tenharim, afirmó: “Cuidamos de esta tierra, de nuestro territorio. Hasta hoy el fuego no había entrado. Pero ahora llegó de repente, en varios lugares. Es aterrador para nuestro pueblo, porque nuestros hijos enferman, mata a los animales y solo trae cosas malas”.
Por su parte, la conocida lideresa indígena Sonia Guajajara, ha declarado: “Estamos poniendo nuestros cuerpos y nuestra vida al servicio de la preservación de nuestros territorios… Los pueblos indígenas venimos alertando desde hace décadas de las violaciones que hemos sufrido por todo Brasil”.
“La acción depredadora de los madereros, mineros, buscadores de oro y terratenientes del agronegocio, que poseen un poderoso lobby en el Congreso nacional con más de 200 diputados bajo su influencia, así como los proyectos relacionados a grandes iniciativas como las hidroeléctricas, son amenazas que se han agravado terriblemente bajo el Gobierno antindígena de Jair Bolsonaro, quien normaliza, incita y empodera la violencia contra el medioambiente y contra nosotros, los pueblos indígenas y nuestros territorios”.
La lideresa indígena, Sonia Guajajara, afirma que el presidente Bolsonaro normaliza e incita a la violencia contra los pueblos indígenas y el medioambiente. © Survival International
Un grupo de líderes indígenas del pueblo huni kuin manifestó su sentir con estas palabras: “La naturaleza está llorando y nosotros estamos llorando. Si no paramos esta destrucción de la Madre Naturaleza ahora, los hijos de todas las generaciones que están por venir vivirán en un mundo completamente diferente al de hoy. Este es el llamado de la Madre Naturaleza, que nos pide que la apoyemos. Y estamos trabajando en el presente para que todos, como humanidad, podamos tener un futuro. Pero si no paramos esta destrucción seremos nosotros los que nos extinguiremos, quemados, y el cielo caerá sobre nosotros, como ya ha empezado a suceder”.
“Voy a resistir hasta mi última gota de sangre… Es una plaga. Estás viendo las vidas de estos árboles desperdiciadas. Todos esos árboles tenían vida. Necesitaban vivir, cada uno en su lugar. Ustedes pueden ver el daño. El objetivo del hombre blanco es acabar con esto [el bosque]”, expresaba Raimundo Mura, líder del pueblo indígena mura, a la agencia de noticias Reuters la semana pasada.
También la COIAB, Coordinadora de Organizaciones Indígenas en la Amazonia de Brasil, ha emitido un comunicado sobre los incendios.
El director de Survival International, Stephen Corry, ha declarado por su parte: “Estos terribles incendios no son accidentales. El ataque a la Amazonia se está viendo facilitado por la retórica y por las acciones de Bolsonaro contra los pueblos indígenas y el medioambiente, a niveles que no veíamos desde hace 50 años. La Amazonia y los pueblos indígenas están siendo destruidos a un ritmo extremadamente acelerado. La mejor manera de combatir la crisis climática es luchar por los derechos territoriales de los pueblos indígenas”.