Los reyes Felipe y Letizia felicitan a la selección de piragüismo por "enorme éxito y prestigio en ámbito internacional"
Madrid, 26 agosto de 2016.- Los reyes Felipe y Letizia han remitido un mensaje de felicitación a la selección española de piragüismo por la "gran actuación" en el Mundial 2019, que demuestra el "enorme éxito y el prestigio" de este deporte en el ámbito internacional, tras cosechar este fin de semana 7 medallas, entre ellas el subcampeonato mundial alcanzado por el K4.
Las siete medallas fueron un oro en C2 200 (Alberto Pedrero-Pablo Graña), tres platas en K4 500 (Craviotto-Arévalo, Cooper y Germade), K2 1000 (Cubelos-Peña) y K2 500 (Roza-Llenín) y tres bronces en C2 500 (Segura-Benavides), K1 200 (Garrote) y K1 200 (Portela). El equipo nacional, además de las 7 medallas, ha asegurado para Tokio 2020 la clasificación de cuatro embarcaciones para los JJOO (K4 500 de Craviotto, Arévalo, Cooper y Germade; K2 1000 con Paco Cubelos e Iñigo Peña, y los K1 200 de Carlos Garrote y Teresa Portela) y dos para los Paralímpicos (Higinio Rivero en VL2 y Juan Valle en KL3). Los monarcas expresan su "enhorabuena" a la selección española de piragüismo a través de un escrito remitido al presidente de la entidad federativa, Juan José Román Mangas, al que piden que la haga extensiva a todos los palistas que compitieron en la ciudad húngara de Szeged, y muy especialmente, a los medallistas.La mayoría de los integrantes de la selección regresan hoy a España, si bien alguno ya lo hizo ayer, como la gallega Teresa Portela, que obtuvo el pase para participar en los que serían sus sextos JJOO, convirtiéndose en la primera deportista femenina del país en conseguirlo.
El entrenador del K4, Miguel García, explica: “Yo sé que se habla de esta embarcación como el buque insignia del equipo español pero eso no me gusta, somos un barco más de la Federación y lo que está claro es que ahora mismo hay un equipo español super potente y compacto, que no sale de otro sitio que no sea el trabajo de todos”.
Puntualiza que 2019 ha sido un año “muy complejo y duro”, marcado por los problemas físicos que condicionaron la preparación de los palistas, la renuncia del campeón olímpico Cristian Toro cuando restaban tres semanas para el Mundial y la lesión muscular padecida por Cooper el día antes de viajar a la cita clasificatoria de Szeged, el sitio “idóneo” para lograrla. “La vida, a veces, te pone en situaciones difíciles y te tienes que reinventar, tuvimos que superar lesiones y situaciones complicadas, y de todo eso el equipo ha salido fortalecido”, apunta el técnico asturiano, que añade: “le brindamos el éxito y la medalla a Toro para que se recupere pronto”. Miguel García confiesa: “Esta plata nos sabe a oro por todo, por cómo compitieron, porque el martes no sabíamos si Cooper iba a poder llegar y cómo sus compañeros se pusieron orejeras y salvaron la situación con profesionalidad”. García, que cuenta con el valenciano David Calvente como segundo entrenador, recuerda que ayer “hubo un momento en el que parecía” que el K4 español “se podía comer” al alemán en el particular duelo que mantienen ambos, pero "ellos están muy compenetrados y bien de forma, así que metieron otro ritmo”. - Vídeo Declaraciones Miguel García https://drive.google.com/file/d/1moAVeRzRC1nu0DOlwZfkaofV2h5EYOIC/view?usp=sharing
Foto Szeged (Hungría).- El entrenador del K4 500, Miguel García (2i), y el segundo técnico, David Calvente (3i), junto a los integrantes de la embarcación subcampeona del mundo Carlos Arévalo (1d), Marcus Cooper Walz (2d), Saúl Craviotto (3d) y Rodrigo Germade (1i) en el campo de regatas de Szeged en Hungría. Foto: Roi F.F.