Gijón.- El concejal del Grupo Municipal de Ciudadanos, Rubén Pérez Carcedo, ha pedido esta mañana a la alcaldesa a aclarar la situación del contrato de la Residencia Universitaria una vez que ha finalizado el plazo dado a la empresa RYA Residencias para que aportase una serie de documentación justificativa de que las obras pueden realizarse dentro del plazo comprometido de cara a la posible concesión de una nueva prorroga. Una prorroga que sería ya la tercera, sin que haya habido ni un solo movimiento de tierras en la parcela.

En este sentido, explicó que la empresa había solicitado esta tercera prorroga el pasado 27 de junio, sin mayor justificación, por lo que los servicios municipales le requirieron un informe acreditativo de que podría realizarla en el plazo. Informe que presenta el día 22 de julio y que se limitaba a un párrafo firmado por un técnico de la empresa que no parece haber estado vinculado a la elaboración ni del proyecto constructivo ni del estudio de seguridad y salud, entregados a la hora de solicitar la licencia de construcción, y sin haber aportado ninguna justificación del cumplimiento de los plazos ni el nuevo cronograma de las obras que permita conocer dónde se pretende reducir la duración de la obra. Ante estas carencias se le vuelve a solicitar más documentación el pasado 24 de julio concediéndosele un plazo de diez días a contar desde la recepción de esta notificación, que fue el 29 de julio por lo que el plazo había finalizado este viernes.  “Finalizado este plazo es el momento de aclarar si habrá prorroga o no. Si la hay queremos conocer la fecha concreta en la comenzarán las obras, así como el nuevo cronograma de realización de las mismas, y si no queremos conocer la alternativa que maneja el equipo de Gobierno, si es que se tiene alguna”, señaló Pérez Carcedo. A su juicio concederles esta nueva prorroga es reincidir en el error y seguir apostando por un proyecto que está abocado al fracaso.

“La empresa obtuvo la concesión para la construcción de la residencia en mayo de 2016, desde octubre de 2017 cuenta con licencia, y sin embargo las obras nunca llegaron a comenzar y todo han sido excusas desde el principio”, señaló. Recordó además que el contrato obliga a que la finalización de las obras y su puesta en explotación tiene que producirse antes del 3 de octubre de 2020. “Es decir quedan menos de catorce meses y el proyecto original hablaba de un mínimo de dieciocho. No nos creemos que se pueda ya cumplir con el plazo previsto”, señaló. Por ello, recordó que su formación política hace tiempo que considera que la opción más viable sería rescindir ya este contrato a la vista de su incumplimiento y apostar por habilitar como residencia el antiguo colegio menor de la Universidad Laboral.  “Ya se ha perdido demasiado tiempo en prorrogar proyectos fallidos. Hay que exigir al gobierno del Principado de Asturias, como titular de este edificio, que se implique y se comprometa con el desarrollo del campus gijonés. Sin residencia es difícil que nuestro campus pueda competir por captar más alumnos y nuevas titulaciones. Su construcción es una prioridad para Gijón”, concluyó