La bajada de guardia en la prevención del VIH viene acompañada de otro daño colateral. La sífilis está viviendo un rebrote en los países occidentales desde la llegada del nuevo siglo, especialmente entre los hombres que mantienen sexo con hombres. Un estudio publicado en el último número de Gaceta Sanitaria revela que el 4,6% de los homosexuales que acudieron en 2006 a un centro de prevención del sida de Valencia presentaba infección por sífilis. La cifra podría parecer menor si no fuera porque el porcentaje en el año 2000 era tan sólo del 0,7%.
Así, mientras la prevalencia de sífilis se mantiene estable por debajo del 1% en los usuarios heterosexuales, en los hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres el porcentaje ha aumentado del 0,7% de 2000 al mencionado 4,6% de 2006. La coinfección de sífilis y VIH también es más alta en el colectivo homosexual. El 6,3% presenta ambas infecciones, mientras que en heterosexuales la cifra se reduce al 2,5%.
Para determinar los factores de riesgo asociados con la sífilis, el estudio ha analizado las conductas sexuales y el consumo de drogas de los 1.387 usuarios del centro que manifestaron tener relaciones homosexuales. El riesgo de infección es menor entre los que tienen estudios universitarios y, en cambio, es diez veces más elevado entre aquellos que practican la prostitución y casi cinco veces mayor entre los que consumen drogas psicotrópicas como el éxtasis o la metanfetamina.
El repunte de la sífilis es, por tanto, sustancialmente superior en los hombres que tienen sexo con hombres. Los autores sugieren, no solo una mejora de los sistemas de vigilancia, sino también la implementación de acciones preventivas específicas en lugares de ambiente para informar al colectivo homosexual de los riesgos que conllevan las relaciones sexuales sin protección.