Activistas de Greenpeace denuncian en la estatua de Colón de Barcelona la indiferencia política frente a la crisis climática durante la campaña electoral
Un grupo de activistas de Greenpeace ha accedido de forma pacífica esta mañana al monumento de Colón de Barcelona donde han desplegado una pancarta con el mensaje en catalán “Urgencia climática. Piensa, vota, actúa”, para denunciar la indiferencia de la clase política sobre cuestiones como la crisis climática durante la campaña electoral. La organización ecologista y pacifista pretende alertar a la ciudadanía en la jornada de reflexión de la urgencia de este problema y del poco tiempo que le han dedicado los candidatos.
Además de la pancarta, el grupo de activistas también ha colocado unas gafas de bucear a la estatua para visualizar de forma simbólica uno de los muchos impactos que el cambio climático va a ocasionar, como es la subida del nivel del mar. Otros de los impactos que sufriremos son: aumento de temperaturas y olas de calor, efectos sobre la biodiversidad, aumento de especies invasoras, incremento de incendios de alta intensidad, deshielo, desertización o fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes que provocarán también efectos en la salud y en sectores como la agricultura, la energía, el turismo o la alimentación.
España es el país más vulnerable de Europa al cambio climático, donde la temperatura media ya ha subido 1.5 ºC en las últimas tres décadas. Según el último análisis de la AEMET ya tenemos veranos casi cinco semanas más largos que a inicio de los años 80 y aproximadamente 32 millones de personas ya se han visto afectadas por el cambio climático principalmente por las olas de frío y calor.
El Panel Intergubernamental de expertos de Naciones Unidas sobre cambio climático (IPCC) ya ha alertado de que para evitar el aumento de 1,5 ºC de las temperatura globales, con una cierta probabilidad de éxito, nos quedan poco más de diez años para actuar y evitar así los impactos más peligrosos del cambio climático. Esta situación de emergencia climática y social es un gran un reto, que se puede convertir en una gran oportunidad si se apuesta por una economía solidaria y verde que redistribuya la riqueza en nuestro país. La transición ecológica es una oportunidad para la creación de un nuevo modelo socio-económico.
Un día antes del comienzo de la campaña electoral, Greenpeace ya desplegó una pancarta con forma de factura gigante en las torres de Colón en Madrid con el lema “Nos están costando la vida, nos están costando el planeta” y un desarrollo detallado de los costes que paga la sociedad ante la inacción política y los intereses económicos, entre ellos la crisis climática. Desde entonces la organización ha reclamado durante estas dos semanas que las diferentes fuerzas políticas hablen durante la campaña de sus propuestas y compromisos en la lucha contra el cambio climático, como está exigiendo la juventud movilizada que ayer volvió a salir a la calle.
“Cada vez la sociedad reclama con más fuerza soluciones para atajar el cambio climático y durante esta campaña los candidatos han mostrado ir varios pasos por detrás de la urgencia del problema y la preocupación ciudadana. Aun así, esperamos que esta campaña marque un punto de inflexión y que a partir de mañana, salga el Gobierno que salga, el medio ambiente y la crisis climática pasen a un lugar central de la agenda de gobierno”, ha declarado Mario Rodríguez, director de Greenpeace.