En Asturias, 1.342 personas precisan tratamiento renal sustitutivo; es decir, diálisis o trasplante; y más de la mitad, concretamente, 719 están trasplantadas. Desde 2010, la cifra de trasplantados no ha dejado de crecer, hasta situarse el año pasado en 77, cinco más que en 2017. La media de edad de los pacientes que han recibido un riñón es de 53 años.
Además, el Principado es una de las comunidades con mayor porcentaje de personas en diálisis peritoneal, una técnica más efectiva que la hemodiálisis, ya que mejora notablemente la calidad de vida de los afectados y que en los últimos años se ha impulsado en todo el mundo.
Estas cifras miden la solidaridad de los asturianos y la eficacia de la sanidad en nuestra región, que, con sus donaciones y la atención que presta, posibilitan hacer frente a una enfermedad que afecta a 850 millones de personas en el mundo y genera al menos 2,4 millones de fallecimientos al año, lo que la convierte en una de las causas de mortalidad de más rápido crecimiento en los últimos tiempos.
Ese compromiso e implicación es lo que ha querido premiar la Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades Renales, ALCER, cuyo presidente en Asturias, Rogelio García Suárez, entregó este miércoles el pin de oro de la entidad al presidente de la Junta General del Principado, Pedro Sanjurjo, en quien personificó simbólicamente a los asturianos y asturianas que donan órganos y colaboran con su ayuda.
"En el Principado, resaltó, esa solidaridad se mide en los 67 donantes por millón de habitantes que aportan sus órganos a la causa, una cifra muy superior a la media de nuestro país, que también lidera mundialmente las donaciones".
En su agradecimiento, el presidente de la Junta General del Principado, Pedro Sanjurjo puso a ALCER como ejemplo del "espíritu comprometido de los asturianos", del que, según sostuvo, "da cuenta la abundante nómina de asociaciones, entidades y personas que, de modo libre, responsable y altruista, sin buscar beneficio material alguno, dedican tiempo y esfuerzos a causas que contribuyen de manera decisiva a la construcción de una sociedad mejor, más igual, libre y solidaria".
Sanjurjo destacó el constante trabajo, mantenido durante 40 años por la asociación, para mejorar la calidad de vida de las personas con insuficiencias renales y contribuir a la difusión e investigación de la enfermedad y a la financiación y creación de centros especializados para el tratamiento. "Enhorabuena por vuestro trabajo y entusiasmo, porque pertenecéis a ese selecto grupo de asturianos que, con una fidelidad encomiable, realiza una aportación esencial para la salud pública y para las personas afectadas", dijo.
Además del consejero de Sanidad del Principado de Asturias, Francisco del Busto, estuvieron presentes en este acto, celebrado en el Salón Europa del Parlamento asturiano, el presidente de ALCER Asturias, Rogelio García Suárez; el presidente de la Federación Nacional de ALCER, Daniel Gallego Zurro; el presidente de la Fundación ALCER, Alejandro Toledo Noguera; la directora de la Unidad de Gestión Clínica de Nefrología del Área Sanitaria IV, Carmen Díaz Corte; la coordinadora de Trasplantes de Asturias, Dolores Escudero Augusta, miembros de la directiva de ALCER Asturias y portavoces de los Grupos y un buen número de parlamentarios de la Junta General del Principado de Asturias.